Adabel Guerrero,calificada por Moria Casán de falsa mística, provocó con la danza del caño a chanchos lenguetazos con cara de inocente payasa
La bailarina realizó una coreografía hot en la primera gala de “caño” y se cruzó duramente con Alfano y Moria en ShowMatch, el programa que conduce Marcelo Tinelli en El Trece. La tercera versión del “Caño” se presentó con un show de apertura que contó con la participación del staff de bailarinas de ShowMatch, acróbatas y especialistas de pole dance, con guantes que lucieron leds luminosos y una espectacular cortina de humo artificial que proyectó imágenes digitales, al son de un popurrí de canciones pop que fueron éxito en la década de los ochenta.
LAS HERMANAS ABRIERON LA GALA
Las hermanas Vanina y Silvina Escudero fueron las encargadas de estrenar el ritmo con una coreografía temática en la que representaron a enfermeras del futuro muy sensuales. Silvina reveló que a lo largo de los ensayos superó un pánico a las alturas gracias a la labor de los coach.
Graciela Alfano confesó que la performance fue erótica y se puso de pie para ponerles a las hermanas un 10. Flavio Mendoza (voto secreto) también celebró: “Han aparecido las Escudero, carajo. Hicieron figuras en altura y muy complejas”. Moria Casán –que agradeció los saludos por su cumpleaños- felicitó a Vanina por sus movimientos, que calificó como fluidos, con un 9. Aníbal Pachano continuó la ola de elogios con un 5 y por último, Marcelo Polino cerró con un 4. Total: 28 puntos.
El periodista discutió con Álvaro Waldo Navia por declaraciones que hizo en medios uruguayos y el humorista evitó responderle para “no perjudicar a las chicas que hace dos semanas que están ensayando”.
PEDRO ALFONSO Y EL AMOR OBRERO
Después de que Paula Cháves admitiera que no quiere casarse por ahora con Pedro Alfonso, el productor se presentó en la pista decidido a ratificar sus intenciones de pasar a una “nueva etapa” en la relación. Los tórtolos cruzaron chicanas propias de la convivencia y se justificaron por tener “personalidades fuertes”. La modelo comentó que a veces discuten durante un período tan prolongado que no se acuerdan por qué estaban debatiendo y Peter sonrió: “Encima estamos en un momento en el que no pasamos desapercibidos cuando vamos a comer afuera y tenemos que simular que está todo bien cuando discutimos. Pero después nos reconciliamos”.
El productor “estrella” arrancó su coreografía parado sobre el caño horizontal de la “h”, alegando ciertos miedos a la altura y vestido de operario de la construcción. A lo largo de “Black in back” (ACDC), se fue desvistiendo al igual que su compañera Julieta Sciancalepore. La tribuna, sus compañeros de trabajo, las bailarinas y hasta el propio Tinelli explotaron en una ovación al final. “¡Qué groso! Yo le pondría un 100”, dijo el conductor.
Graciela Alfano (10) no ocultó su emoción: “Me mataste, Pedro. Reivindico el olfato de Tinelli para descubrir a un groso como él”. Flavio adelantó su “mejor nota” al decir: “Dejemos de lado la broma de que no es Hernán Piquín. Es Pedro Alfonso y me sorprende día a día. Si Paula no lo quiere, lo quiero yo”. Moria Casán destacó el esfuerzo del productor y el “buen comienzo y el buen final de la coreografía y los cambios de velocidad” al aportar su 10. Pachano (6) coincidió: “Sólo los que hacen caño saben lo que cuesta”; mientras que Polino (4) vio algunas desprolijidades y completó los 30 puntos.
Pedro se emocionó al escuchar las palabras del jurado, al igual que su novia y su familia –presentes en el estudio-.
ADABEL CALENTÓ LA PANTALLA A LENGUETAZOS LIMPIOS
Adabel Guerrero y Martín Whitencamp ofrecieron una nueva propuesta: los sado-masoquistas. Látigo en mano, la bailarina obligó a Marcelo Tinelli a subirse a la H con una voz sensual que le hizo honor a las correcciones que le habían dado los jueces de Bailando 2011. Con una coreografía super hot y cubierta apenas por un par de cinturones alrededor de su escultural figura desnuda, Guerrero prendió fuego el estudio y exclamó al final: “¡Lo quiero hacer de nuevo!”
Las repeticiones de los mejores momentos del “caño” de Adabel se sucedían una tras otra mientras el conductor recuperaba el aliento. La cadena nacional le dio el tiempo suficiente a Tinelli para lograrlo y darle paso al jurado.
“Ese cuerpo tiene una disciplina extraordinaria. Me encanta la voz que impostaste. Te suma. Lo que hiciste en el caño –a nivel técnico- es extraordinario, pero no sentí. Fue como frío todo”, fue el análisis de Graciela Alfano (8). “Voy a disentir con mi compañera: después de éste caño no habrá otro igual. Te veo en bolas y me olvidé hasta de Marcelo. Nunca en mi vida hice una inversión hacia abajo. Por más que haya gente que vaya en contra de todos, lo que hiciste fue lo más perfecto que ví”, concluyó Mendoza.
Moria Casán (7) criticó la “tomada de pelo” de haber cambiado la voz en la previa y más tarde, señaló: “Lo que hiciste no coincide con tu Tibet de cabotaje que traés acá. Fue porno y debería haber sido más acotado. Sentí que toda esa performance hubiese sido mejor si no hubiese tenido tanta silicona suelta. No es acorde con el planteo espiritual, con esa intención que tenés de darnos lecciones de moral. Es una falta de respeto. Es too much. Se vio vulgar”. En un momento Moria la calificó de “extraña mística…” ,seguramente por los chanchos lenguetazos…
Adabel retrucó: “No los entiendo. No comprendo la devolución de algunos. Se agarran de mi previa para decir cualquier cosa. Estoy harta de escuchar pavadas. No es soberbia lo mío, pero para una fue frío y para otra pornográfico”. Su compañero se quejó: “Es una ridiculez. Nos matamos laburando y dicen esto… Con todo respeto, Graciela y Moria me parecen ridículas” A continuación, se sumó la coach: “¿Se castiga el saber (bailar)?” El debate quedó abierto.
Alfano intentó cambiar su nota, de 8 a 1, debido a la reacción de Whitencamp pero Marcelo Tinelli le aclaró que no era posible. Graciela amenazó con renunciar al certamen si el soñador no se retractaba públicamente: “Yo no lo insulté al Sr. y no tengo por qué recibir insultos de una persona que recién comienza. Mi trabajo es juzgar y no tengo por qué bancarme esto. Sinceramente no quiero seguir en el concurso”.
Adabel buscó una nariz de payaso y se la colocó para escuchar las palabras de Alfano y Moria, provocando el enojo de las juezas.
Pachano (8) tomó la palabra y dijo: “Me parece, de corazón, que hay ciertas contestaciones que están de más. Fue una coreografía impresionante con una destreza pocas veces vista y quisiera decir que faltó en ese cuerpo maravilloso que tenés, un sentimiento. Estuvo bueno lo que dijo Graciela para ser escuchado, en ese sentido. Nunca logré subir 10 centímetros en tela y sé lo que cuesta, por eso creo que el bailarín habló desde el cansancio”.
Marcelo Polino cerró la ronda de devoluciones con un 10: “La córeo fue impactante. Me deslumbró la pareja con su belleza, carisma, juventud y erotismo. No merecen más que un escandaloso 10”. Total: 33 puntos.
Antes de retirarse del estudio, Martín Whitencamp le pidió disculpas a Graciela y Moria: “Fue una exaltación de mi parte y les pido perdón”.foto Jorge LUENGO.-