Una creación periodística de Luis Pedro Toni

Balance del último Cannes que terminó poeticamente

Una de las obras más extrañas, poéticas y mágicas que se vieron en Cannes, el filme de Weerasethakul sumerge al espectador en un mundo de espíritus, fantasmas y hombres reencarnados en criaturas de la selva, con un relato misterioso que su cámara se encarga de acentuar a través del registro contemplativo de la naturaleza y la cadencia calma de sus personajes.

El premio al Mejor Director lo recibió otro francés, el actor y cineasta Mathieu Amalric, por “Tournée”, mientras que el premio al Mejor Actor fue compartido por el español Javier Bardem, por “Biutiful”, de Alejandro González Inárritu, y por el italiano Elio Germano, por “La nostra vita”, de Daniele Luchetti.En la gala de Biutiful estuvieron en la alfombra roja y en la sala Lumiere Dolores Fonzi con el actor Gael García Bernal, que tiene un hijo,Lazaro, muy amarraditosd dando por tierra de todos los rumores de separación.

En tanto, el premio a la Mejor Actriz fue para la francesa Juliette Binoche, por su sensible interpretación en el filme “Copie conforme”, de Abbas Kiarostami, y el premio al Mejor Guión recayó en el coreano Lee Chang-dong por su película “Poetry”.

El Premio del Jurado, que estuvo presidido por el estadounidense Tim Burton, recayó en “Un homme que crie”, del cineasta chadiano Mahamat-Saleh Haroun, mientras que la Cámara de Oro a la mejor opera prima del festival fue para “Año bisiesto”, del mexicano Michael Rowe, que competía en la sección Un Certain Regard.

La argentina Mónica Lairana, que competía por la Palma de Oro al mejor cortometraje con “Rosa”, finalmente quedó fuera del palmarés, ya el jurado decidió premiar al francés “Chienne d’Hitoire”, de Serge Avédikian, como mejor película, y entregar un premio especial a “Micky Bader”, de Frida Kempff.

Los premios fueron entregados en una ceremonia llena de glamour que se llevó a cabo en el Gran Teatro Lumière de Cannes, con la conducción de la actriz británica Kristin Scott Thomas, y estuvo precedida por el desfile por la popular alfombra roja de numerosas estrellas del cine local e internacional.

“Steven Spielberg dijo que Cannes es una fortaleza que protege al cine”, dijo Scott Thomas, al dar comienzo a la ceremonia y llamar al escenario al cineasta Atom Egoyan, presidente del jurado de cortometrajes, que afirmó que había asistido a “una selección formidable, dueña de una gran diversidad”.

Luego fue el turno del premio Cámara de Oro a la mejor primera película del festival, que fue entregado a “Año bisiesto” por la francesa Emanuelle Beart y el mexicano Gael García Bernal, quien presidió el jurado encargado de juzgar a “21 operas primas que -según dijo- fueron todas ellas películas muy brillantes”.

Inmediatamente después subieron al escenario Tim Burton y los otros miembros del jurado oficial, el director del Museo de Cine de Turín, Alberto Barbera, los actores Benicio del Toro, Kate Beckinsale y Giovanna Mezzogiorno, el guionista Emmanuel Carrère, el compositor Alexandre Desplat y los cineastas Shekhar Kapur y Víctor Erice.

El primero de los premios principales fue anunciado por la actriz y cineasta Asia Argento y se trató del Premio del Jurado, que recayó en “Un homme que crie”, de Mahamat-Saleh Haroun, quien realiza un retrato conmovedor sobre un hombre angustiado por la situación política y económica en Chad, en medio de una guerra civil.

Uno de los momentos emotivos fue el anuncio del premio al Mejor Director para Mathieu Amalric, quien parecía tener hinchada propia, ya que recibió una catarata de aplausos al subir al escenario a recibir su diploma por “Tournée”, donde él mismo interpreta a un ex productor televisivo que recorre pequeños pueblos de Francia con un show de bailarinas de cabaret.

Pero el momento más emotivo fue sin dudas cuando Juliette Binoche recibió el premio a la Mejor Actriz por “Copie Conforme”, la primera película que el iraní Abbas Kiarostami filma en Europa, para narrar la historia de una pareja que se reencuentra después de 15 años y renueva, con pequeños momentos de intimidad, desencuentros y discusiones de todo tipo, la misma pasión que los había unido la primera vez.

Binoche agradeció la “generosidad” de Kiarostami y “el milagro” de haber podido trabajar con él, pero sus palabras se concentraron en recordar al cineasta iraní Jafar Panahi, quien iba a formar parte del jurado oficial del festival, pero no pudo hacerlo porque desde hace meses permanece preso en su país por motivos políticos.

Al subir a recibir el premio al Mejor Actor, Bardem -quien en “Biutiful” encarna a un hombre que está muriendo de cáncer y hace todo para redimirse de sus pecados- subrayó “el excelente trabajo” del mexicano Gonzáles Iñárritu y, dirigiéndose a Penélope Cruz, afirmó: “Comparto esta alegría con mi amiga, mi compañera y mi amor”.

El español compartió el premio al Mejor Actor con el italiano Elio Germano, quien dedicó su galardón “a Italia y al pueblo italiano, que estamos haciendo un gran esfuerzo para hacer un país mejor, a pesar de nuestros políticos y nuestra clase dirigente”, en una clara crítica al primer ministro Silvio Berlusconi.

En “La nostra vita”, Germano interpreta a un obrero de la construcción que ve transformada su vida sencilla y feliz por un trauma familiar inesperado, algo que lo derrumba y de lo cual sólo puede salir gracias al respaldo de sus parientes, sus amigos y sus hijos.

El premio al Mejor Guión fue para el coreano Lee Chang-dong por “Poetry”, una película que parecía aspirar a la Palma de Oro por su rotunda historia protagonizada por una mujer excéntrica, llena de curiosidad, que comienza a asistir a cursos de poesía y, por primera vez en su vida, logra escribir un poema -Enviado especial de Telam.