Buen debut de El secreto de sus ojos
La película argentina El secreto de sus ojos, dirigida por Juan José Campanella y protagonizada por Ricardo Darín y Soledad Villamil, cosechó hoy admiración y aplausos en el público que asistió a su primera proyección en el Festival de San Sebastián, donde es el único crédito argentino y latinoamericano que compite por la Concha de Oro.
Habrá que ver qué sucede con las otras películas de la competencia, pero si la intensidad de los aplausos, las emociones y la sensación de bienestar que causó entre la gente pudieran medirse en términos concretos, seguramente el nuevo filme del autor de El hijo de la novia y Luna de Avellaneda sería hoy el claro ganador del premio del público del certamen.
Es que la excelente química que se produce entre Campanella, Darín y Villamil en El secreto de sus ojos –y que recuerda a la que ya habían demostrado hace diez años en El mismo amor, la misma lluvia– provoca gran aceptación entre los espectadores y genera un enorme interés en periodistas y fotógrafos, tal como quedó demostrado en la rueda de prensa posterior a su proyección.
Basada en la novela La pregunta de sus ojos, de Eduardo Sacheri, y con guión del propio escritor y Campanella, la película es un rotundo éxito de taquilla en la Argentina, donde la vieron casi un millón y medio de personas, cuenta además con las actuaciones de Pablo Rago, Guillermo Francella y Javier Godino, y llegará a las salas españolas el próximo 25 de setiembre.
Modesto y de muy buen humor, Campanella recordó que antes del estreno del filme “tenía miedo por los prejuicios que existen generalmente. Siempre pienso que va a ser un desastre y por eso digo que en el cine no existe la felicidad, sino el alivio. Nunca esperamos que la película funcionara tan bien en la Argentina, ya que incluso superó al éxito de El hijo de la novia”.
En ese sentido, Villamil agregó que “es muy notable lo que le sucede a la gente con la película. Y tanto en el entorno cercano como en la calle se recibe mucho agradecimiento por las vivencias que transmite. Creo que eso se debe a una combinación muy exacta entre contenido y entretenimiento, en el buen sentido”. (Télam)