La proyección de la sorprendente ópera prima de Minujín, quien ya había dado muestras de su capacidad como director con “Guacho”, un cortometraje que anticipaba este filme y que participó de la Berlinale, fue precedida de una breve pero accidentada ceremonia de apertura, que estuvo conducida por Lombardi y el director del Bafici, Sergio Wolf.

El acto de inauguración de esta nueva edición del certamen empezó a las 20.10 en el Teatro 25 de Mayo de esta ciudad, donde Lombardi tomó la palabra pero fue inmediatamente interrumpido por el actor Luis Ziembrowski, quien subió al escenario y leyó una hoja con reclamos salariales de la Asociación Argentina de Actores.

Ya en la calle, en la entrada al teatro, varios actores entregaban a los invitados una nota donde detallaban el conflicto que tienen con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que se habría originado –según afirman en el texto- porque desde enero pasado los actores, directores, escenógrafos y vestuaristas del Complejo Teatral de Buenos Aires “no tienen contrato ni cobran sus salarios”.

Ante la sorpresa y el silencio del ministro de Cultura porteño, Ziembrowski le reclamó “que se regularicen las condiciones laborales de los actores del Complejo Teatral de Buenos Aires” y se dirigió a la audiencia diciendo: “Nos presentamos así porque queremos hacerles conocer una situación que afecta a los actores y que Lombardi ya conoce”.

Tras el reclamo de los actores, Wolf retomó el hilo de la ceremonia y destacó que “Vaquero”, una comedia negra que describe la interioridad de un actor resentido con el medio y con sus colegas, fue la primera ópera prima en inaugurar una edición del Bafici desde 2001, cuando Sólo por hoy, de Ariel Rotter, fue la encargada de abrir la muestra.

La película de Minujín describe con crudeza un momento patético y miserable en la vida de Julián Lamar, un actor mediocre, resentido y solitario, que envidia a sus compañeros de trabajo, reniega del medio, no puede relacionarse con los demás y, repentinamente, se pierde en pensamientos y diálogos internos sobre masturbación y pornografía.

Wolf afirmó que “estos 13 años de festival marcan una fuerte continuidad y una relación fluida con su público” y recordó que “los cineastas que el Bafici ha promovido, hoy circulan por distintos festivales del mundo. Y esto nos llena de orgullo”, agregó.

Luego de anunciar que este será “un año muy particular, con mucho cine argentino”, el director del Bafici abogó por que “haya más cine, un cine más inquieto, más plural y provocativo”, y luego hizo pasar al escenario a Juan Minujín, actor y director de “Vaquero”, y a los actores Leonardo Sbaraglia, Esmeralda Mitre, Pilar Gamboa y Julieta Vallina.

Antes del largometraje de Minujín fueron exhibidos los tres cortometrajes institucionales del Bafici que acompañarán a las distintas proyecciones y que este año fueron realizados por el Grupo Humus, Raúl Perrone y Martín Rejtman, destacados artistas que participaron con sus películas en anteriores ediciones del festival.