Un plástico colocado en el techo de la discoteca, altamente inflamable y que ardió rápidamente, y la existencia de una sola salida habilitada contribuyeron a incrementar el trágico balance del incendio ocurrido anteayer en una discoteca en Perm, que dejó hasta el momento 107 muertos y 130 heridos, en el peor desastre de ese tipo desde la caída de la Unión Soviética.

El incendio se generó por el uso de fuegos artificiales en el escenario del club nocturno Lame Horse, que hicieron estallar en llamas el techo del local. Muchas de las víctimas quedaron atrapadas al precipitarse en medio del pánico hacia la única salida, intentando escapar de las llamas y de la espesa humareda negra.

“El fuego tardó segundos en esparcirse??, dijo una sobreviviente, Svetlana Kuvshinova. “Sólo había una salida. Casi me pasaron por encima en la estampida.??

Svetlana contó que las llamas consumieron rápidamente unas decoraciones de ramas colocadas en el techo, que también tenía un aislamiento plástico.

Leonid Miroshnichenko, que perdió a su hija en el incendio, dijo que el techo de plástico del lugar hizo que la cifra final de muertos fuera mayor. “Me gustaría ver al funcionario que permitió que este club funcionara. Fue él quien mató a mi hija”, afirmó
PERM, Rusia (AP)