Una creación periodística de Luis Pedro Toni

EL DOLOR DE VICTOR HEREDIA

“Si tuviera que elegir un momento compartido con ella, un recuerdo, elegiría cuando la vi cantar un tema mío, llamado “Una canción posible” en el Carnegie Hall de Estados Unidos. Fue en 1989, y allí ella sintetizó todo el drama que nos había tocado vivir”, recordó Heredia.

“También rescato su vocación tremenda por la recuperación del espacio democrático, algo que señalaba en forma permanente desde el exilio”, agregó el cantante, uno de sus más fieles compañeros de ruta.

Heredia manifestó que “cuando Mercedes estaba en el exilio estaba siempre dolorida, nunca disfruto de todo lo que le brindaba su éxito como artista. Ella sentía la necesidad de volver a la Argentina a reencontrarse con sus hermanos, con las libertades que habíamos perdido”. Telam