Una creación periodística de Luis Pedro Toni

EL RECUERDO DE AMIGOS Y COLEGAS

Un manto de tristeza cubre a todo el mundo del espectáculo, que llora la muerte de Juan Alberto Badía, un ícono de la radio y la televisión argentina.

Entre las primeras condolencias, se encuentra el testimonio de la actriz Graciela Borges, quien estuvo hasta los últimos minutos a su lado:

“Murió en el cuarto en el que estábamos con toda su familia, también Marcelo Tinelli. Tanta admiración y tanto amor. Fue muy fuerte lo que nos pasó y se fue en paz. Fue una persona maravillosa, se adelantó en el camino. Juan Alberto prestigió su profesión”, dijo.

La conductora Pinki, también se despidió a través de la televisión, y deseó haber podido darle un último beso.

“Recibí tan mal la noticia. Estaba esperándola en realidad, pero me daba una tristeza enorme, no he podido dormir, me he llenado de lágrimas. Yo lo he querido mucho. Hay palabras que ya no tienen sentido para mucha gente, pero ser una persona de bien es muy importante. Era un muchacho que le sacaba al entrevistado cosas de su corazón”.

“Tenía una de los cánceres más espantoso. Yo tuve cáncer y en aquella época no existía nada más que cirugía. Cuando me enteré que tenía neumonía se me paró el corazón. Pero creo que en el último tiempo se fue despidiendo. Él trasciende la muerte porque ha dejado una huella y un estilo que no se compara”, finalizó.

Otra voz que quiso rendirle un homenaje, fue su amigo Cacho Fontana: “Hablé con él después del tema de River y me sorprendió la noticia ayer. La rapidez con que el tiempo se llevó la ilusión de vida que él tenía. Ha dejado una enseñanza de fuerza. Estaba muy contento, venía una despedida inesperada. Jamás se quejaba ni mostraba dolor, él estaba preocupado por cómo estabas vos por ese momento”.

Dentro de su querido River, uno de los ídolos más importantes de la historia del club, Beto Alonso, compartió una anécdota con Badía.

“Se acercó por ser tan fanático de River, aparte la relación era familiar porque sus hijos iban al colegio con mis hijos. Pensé que la había superado pero hoy me llaman para darme esta noticia que me cayó muy mal. Tipos como él no se tienen que ir nunca de este mundo. Le llegó muy pronto y no nos dejó disfrutarlo un poco más. Recién me preguntaron una anécdota: Un día nos fuimos a Cariló a jugar un partido de 5 contra 5. Y me dice que no sabía en qué lugar ponerse de la cancha y le digo: andate al lado del arco y poné la cabeza que vas a hacer el gol de tu vida. Justo le tiro una pelota y cabecea y hace gol. Gritamos, nos abrazamos. Rescato sus condiciones humanas. Cuando es querido por todos quiere decir que es un gran tipo”.

Por último, la cantante Patricia Sosa le agradeció en nombre de todos los músicos: “Siempre te abría las puertas de donde estuviese para todos nosotros. Él ayudó a todos los músicos argentinos y eso se debería escribir en un capítulo aparte, lo que los músicos argentinos hemos recibido de él”.