Al término de la función de El fantasma de la Opera conversamos con el empresario teatral Javier Faroni, quien estaba sentado al lado del empresario que representa a la empresa brasileña (T4F) dueña del espectáculo presentado. Como Faroni había visto El fantasma en Londres y en Nueva York en total unas tres veces valía su impresión de la representación que vimos en el Opera de Buenos Aires:”Igualito en lo esencial y en los detalles a la obra que se presenta en New York y la versión de Londres. La ropa es la misma, espléndida, los efectos mecánicos son igualitos y coordinados a la perfección…, con la caída del gran candelabro y los angelitos en el sube y baja…La calidad de los artistas argentinos y mejicanos no es necesario que la califique yo, excelentes.Y el sonido tiene una ecualización perfecta que no la oí en las presentaciones del exterior. Solo a la obra en inglés le siento más vigor dramático por la síntesis de ese idioma…”

L.P.T.