Una creación periodística de Luis Pedro Toni

Exitoso debut de “Livin la viuda loca” con Flor de la V y Disi

La comedia inuaguró la temporada en el Teatro del Sol 2 con la sala llena. Independizada de Sofovich y estrenando su rol de productora, Flor de la V se mostró muy satisfecha con el debut. La capo-cómica calificó al estreno como de “impresionante, muy feliz. Superó todas nuestras expectativas. Estamos todos muy contentos, no paramos de asombrarnos”.

“Habíamos ensayado mucho y sólo necesitábamos el público y la reacción a risa constante por una cosa tras otra, nos dejó plenos, así que disfrutamos mucho de eso”, y destacó la dirección de “Emilio (Disi), un genio del teatro”.

De la V, elogió a la ciudad cordobesa, en la que se asentó hace varias temporadas, porque “viene formando parte muy importante de mi carrera artística. Los éxitos más grandes los he tenido acá”.

“Para mí lo de anoche fue muy especial. Era un desafío, mi primer emprendimiento empresarial y tenía mis miedos y mis inseguridades, pero el público me sigue apoyando con su cariño, que ya me había dado el día de la inauguración de la temporada del lunes pasado”, añadió.

La pieza, que se extendió por una hora y cuarenta minutos, se desenvuelve en el living de una mansión que pertenecía a un anciano millonario, que antes de morir se había casado con Florencia, vía Facebook, quien pugna por la posesión de la herencia y trama con el mucamo (Disi), para lograrla.

Tras el mismo objetivo se encuentran el hijo del millonario (Toti Ciliberto), la esposa de éste (Victoria Vanucci), la hija (la hermosa vedette paraguaya Dallys Ferreira), en una puja con distintas alternativas, que dan lugar a pícaras ocurrencias que el público festeja de continuo.

Tiene mucha adhesión popular el papel del ’Turco’ Naim, amante de Florencia, que se inserta en la casa y que provoca las mejores risas, como travesti, con ridiculas ropas sobre su fornido cuerpo.

Logran además una buena participación Gabriela Mandato, como amante de Toti, muy cuestionado por su esposa (Vanucci) y su hermana (Dallys) y de Agustina Attias, que es una guardavidas, con tarea en el lago de Villa Carlos Paz.

El ’turco’, olvida su papel, y recupera el de ’macho’, cuando en escena, le quedan cerca las curvas de los esculturales cuerpos de las chicas, con infartantes bikinis, en acciones que son rápidamente superadas por los ’celos’ de Flor, todo rodeado de picarescas expresiones, para las risas de la platea.

De la V, entremezcla expresiones de la misma ficción, y de las vidas particulares de los protagonistas y la que más “recibe” es la Vanucci, con cargadas sobre su esposo, el futbolista Cristian ’Ogro’ Fabiani, con la aprobación de los espectadores.

El último en entrar en acción, es Gabriel Almirón (Pacotillo), en su calidad de abogado para dirimir a los destinatarios de la herencia en cuestión, con un pasaje vestido como bañista, sobre su obeso cuerpo, que genera risas.

A lo largo de la pieza se suceden los enredos, los cuadros sin pausa, sostenidos en el oficio de De la Ve, su lengua rápida y la experiencia de Disi.Telam