Una creación periodística de Luis Pedro Toni

“Felicitas”, un film que se mete con uno de los romances más trágicos de la historia argentina

“Felicitas”, el filme sobre la trágica vida de Felicitas Guerrero, una dama de la aristocracia argentina del siglo XIX, dirigido por Teresa Costantini y protagonizado por Sabrina Garciarena y Gonzalo Heredia, se estrenará mañana jueves 11 en los cines porteños y el interior del país.

Con el fin de contar uno de los romances más trágicos de la historia argentina, desnudar al patriarcado y a la aristocracia porteña, Costantini armó un filme de época, cubierto de carruajes, mujeres con peinetones, botas de tiro alto y mucho encaje.

“La historia me atrapó por hablar de un amor idealizado y trágico, pero también habla del patriarcado, que es un tema que me mueve, porque hay una mujer que no puede elegir, cosa que también sucede con muchas mujeres de nuestra sociedad”, señaló Costantini.

La también autora de “Acrobacias del corazón” y “El amor y la ciudad”, apuntó que “Felicitas” “es una película personal aunque la historia no me pertenece y es pública”.

Felicitas Guerrero, encarnada por Garciarena, era la hija mayor de una familia de la burguesía porteña que se enamora apasionadamente de Enrique Ocampo (Heredia), pero su padre le pone fin a ese romance. Carlos Guerrero (Alejandro Awada) decide obligar a su hija a casarse con Martín de Álzaga (Luis Brandoni), el hombre más rico del Buenos Aires de la época.

Álzaga, 40 años más grande que Felicitas, se enamora de su mujer y no la maltrata, como sí lo hace el padre de la heroína.

Felicitas y Álzaga tienen un hijo, pero ella mantiene una pasión epistolar con Ocampo, que para olvidarse de ella, se enrola en el Ejército para pelear en la Guerra del Paraguay.

Garciarena, que viene de disfrutar del éxito en España de su filme “Pagafantas”, explicó que ya conocía la historia de Felicitas Guerrero.

“Lo que pasa con Felicitas es que se conoce muy poco de ella y había que crearla, leyendo sobre la época, leyendo sobre las mujeres de entonces que toleraban y callaban sus sentimientos y sus ideas”, detalló la actriz.

Tanto Costantini como Garciarena explicaron que se hizo un gran ensayo del guión y que “fue allí, donde yo terminé de armar a Felicitas”, detalló la protagonista de la telenovela “La Ley del amor”.

Por su parte, Heredia confió que la historia le pareció “impactante” y que a su personaje, lo sintió “muy cercano, principalmente por el tramo de la vida de Ocampo que narra la historia”.

Heredia que debutó en cine de la mano de Edgardo Cozarinsky con “Ronda nocturna”, sostuvo que disfrutó “el traslado a los pueblos de provincia como Uribelarrea, donde se filmaron escenas y del contacto con el elenco y la parte técnica, para absorber todo lo que se pudiera del entorno”.

Sobre el trabajo de armado de una película de época, Costantini dijo que “es muy demandante hacer una película de esta envergadura.

Pero por suerte el mobiliario existe, los carruajes, las casas, la cristalería, la vajilla, todo eso lo encontramos”.

En cambio, señaló que “lo más difícil fue el vestuario. Beatriz Di Benedetto vivió una verdadera odisea, porque no las telas y se hacía muy difícil armar todo”.

Telam.