La actriz venezolana Gabriela Spanic abandonó la clínica mexicana en la que fue internada pocos días atrás luego de presentar síntomas de envenenamiento por amonio. Avanza el juicio contra su ex asistente de nacionalidad argentina.

“Estoy sedada, mucha debilidad, mucho dolor en el trigémino (nervio craneal más importante de la cara). Es un dolor peor al de cinco muelas”, aseguró la morocha en una improvisada conferencia de prensa en las escalinatas de la institución médica.

En tanto, el juicio contra María Celeste Fernández, la joven argentina que trabajó como asistente de la actriz y que fue acusada de haber intentado envenenar a toda la familia Spanic, sigue avanzando.

La joven de 24 años fue detenida en agosto pasado y encarcelada luego de la denuncia asentada por la actriz. Al momento de la detención, la argentina cargaba cuatro ampollas con residuos de sulfuro de amonio.

El Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal derivó la causa al juez Enrique Juárez Saavedra, quien deberá fijar las próximas fechas para la presentación de pruebas.