Mariano Grondona se recupera favorablemente del ACV que sufrió a fines de mayo y que le afectó su habla y parte de la movilidad en los primeros instantes.

“Está muy bien y camina, pero siempre se mueve acompañado. Ahora está muy inquieto y espera en agosto volver a su programa de televisión”, confirmó Elena, su mujer, encargada de acompañarlo y cuidarlo día y noche.

Elena asegura que su marido se mantiene muy activo estos días, haciendo sus ejercicios de kinesiología, y muy ansioso de volver a su rutina diaria en radio y televisión. “Su cabeza no para. Yo le digo que se tome unas vacaciones, que aproveche un poco para descansar, pero él quiere seguir y seguir”, explicó.

El periodista y abogado de 79 años ingresó al Instituto de Diagnóstico y Tratamiento (IADT), situado en el barrio de Recoleta, por un cuadro de estrés el pasado 25 de mayo. En un comunicado, se aclaraba que Grondona permanecía en el lugar en estado de “observación”, ante el consejo médico, tras ser sometido a una serie de estudios. Al ser tratado en el lugar, el periodista se recompuso.

Sin embargo, según se publicó, Grondona quedó internado con el habla y su movilidad afectados y con el temor de familiares por las secuelas que podía dejar ese ACV. “Al principio se asustó porque, claro, nunca le había pasado pero ahora esta bien por suerte”, tranquilizó Elena.

Afortunadamente su presente hoy es otro: Grondona hace reposo y cumple rigurosamente con todas las sesiones de kinesiología que le indicaron los médicos. “Algo que lo tiene muy ocupado también son sus memorias, que viene ya escribiendo hace un tiempo”, confesó un amigo que lo vio hace una semana.

Por el momento, sus programas son conducidos por colaboradores. Su clásico programa de televisión “Hora Clave”, en Canal 26, lo conduce el periodista Pablo Rossi, en tanto que en su ciclo radial en radio 10, “Pensando con Mariano Grondona”, es conducido rotativamente por distintos periodistas de esa emisora. “Hace poco lo sacamos al aire en la radio y dijo: ‘Espero en cuatro domingos poder volver’, contó Rossi.

“Lo vi hace una semana y está bien, no tiene ningún rastro de parálisis en su rostro. Pero tiene que recuperarse y no autoexigirse para que su regreso no sea fallido”, agregó su colega. A su vez, su columnas en el diario La Nación fueron escritas en el último tiempo por otros periodistas.