La vedette chilena atraviesa un mal momento. El día viernes por la noche recibió en su domicilio a personal de la comisaría 37 indicando que habían recibido una llamada alertando sobre un explosivo en su auto.

Posteriormente, durante la madrugada del día sábado, volvieron a insistir y el domingo, nuevamente fue la policía su casa diciendo que en su departamento había una bomba.

Hasta el momento, todo indicaría que se trató de una “broma” proveniente de algún paranoico que busca llamar la atención. Se trataría de una falsa alarma.
De igual forma, la morocha se siente desconcertada ante este episodio perverso y mal intencionado ¡Ojalá haya sido sólo un susto!