El director del Teatro Colón, Pedro Pablo García Caffi, suspendió su informe de gestión en la Legislatura porteña al ser increpado por trabajadores de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), que cuestionaron las palabras del funcionario macrista. El funcionario afirmó que el coliseo no está “para ser un seguro de empleados públicos, ni para apilar gente en los pasillos”.

García Caffi, quien asumió al frente del Colón a mediados de febrero, debió ser custodiado por el personal de seguridad de la Legislatura para poder salir del salón Montevideo, donde había concurrido para participar de la reunión de la Comisión de Cultura, citado por la legisladora Inés Urdapilleta.

La reunión comenzó pasadas las 17 en un clima de tensión entre los delegados gremiales con García Caffi, quien días atrás emitió un informe en el cual anunció la reducción de 1200 a 808 empleados, así como la disolución de al menos diez áreas de la tradicional estructura.

“Faltan 17 días para el comienzo de la temporada y este conflicto está muy lejos de resolverse”, afirmó uno de los delegados de ATE, el gremio que denunció la reducción de personal que promueve García Caffi mediante “invitaciones a jubilarse o traslados a otras dependencias del Gobierno porteño, como salud o educación”.

Con este escenario, García Caffi escuchó en la Legislatura los reclamos de los trabajadores y, posteriormente, inició su discurso -que leyó pausadamente- en el cual resaltó que su objetivo era “lograr una estructura orgánica funcional a un Teatro del siglo 21 en el cual las estructuras obsoletas requieren nuevos diseños”.

“Debemos ser un teatro de producción y no un seguro de empleados públicos ni para apilar gente en los pasillos”, aseveró el funcionario y despertó el enojo de los presentes, que comenzaron a insultarlo e increparlo por sus dichos al punto que generaron que el director del Colón se levantara de su lugar y se retirase.

Luego de los forcejeos, la diputada Urdapilleta pidió que la reunión de la comisión continuara, pese a la salida del funcionario.

“Lo que dijo García Caffi fue muy provocador y muy intolerante porque, desde la Comisión, queríamos saber cuál era el criterio para sacar a 400 personas. Creo que lo mandaron a tomar esa decisión”, expresó la legisladora del bloque del Frente para la Victoria.

En tanto, las diputadas Gabriela Alegre y Patricia Walsh pidieron citar para su interpelación al ministro de Cultura de la Ciudad, Hernán Lombardi, quien siempre intentó evitar la polémica en el Teatro y optó, en varias oportunidades, por no participar de los actos que el Ejecutivo convocaba por temas relacionados con el Teatro.

Las calles rotas

Luego, el presidente del bloque PRO en la Legislatura, Oscar Moscariello, admitió que “las palabras utilizadas por García Caffi fueron de un nivel que rayan lo inaceptable”, pero advirtió que “en ese momento, la reunión se desarrollaba en un clima de violencia”. Otro legislador de la oposición comentaba la verguernza que son las calles de Buenos Aires que estan todas en obras, incluso algunas que no estaban detorioradas las rompen para ensanchar innesarios cordones.Cada bajada que hacen en las esquinas el concesionario las cobra a 250.000 pesos cada una, las cuatro esquinas salen un millón de pesos que pagamos todos.Dicen que es un fabuloso negocio ya que esos ensanches en cuatro esquinas cuestan como caros solo 200.000 pesos.En otras calles se hacen curvas y se cambian los cordones que estan bien.El legislador que pidió reserva de su nombre porque esta revisando las concesiones ya que hará en breve la denuncia correspondiente en la legislatura dice que si esa mano de obra y plata se inviertiera en el Colón ya debería estar listo el primer Coliseo para espectáculos.Agencias.