Una creación periodística de Luis Pedro Toni

RICKY DEJA EL ALMA EN EL ESCENARIO

Ricky Martin deslumbró en el Orfeo con un despliegue coreográfico y una puesta fastuosa.
Anoche, el puertorriqueño ofreció una nueva entrega de ese show autorreferencial ante unas ocho mil personas, y dejó en claro que el despliegue coreográfico y el erotismo son los elementos que mejor cuajan con una puesta fastuosa. La música, si bien no está subestimada y es el motor que lo dispara todo, se relega a un segundo plano.
Presentó su nuevo disco que lleva el nombre de Música+Alma+Sexo.
Lo acompañaron ocho bailarines, nueve músicos integrados al prota­gonismo, una puesta de jaulas de varios niveles, pantallas al fondo y a los costados, el vestuario sobrio de Armani. La carga erótica, su­bestimada en el disco, se consumó aquí con el tercer tema, It’s alright, que tuvo a Ricky mostrando el pecho y a sus violeros directamente con el torso desnudo; más adelante, la cuestión se puso más kinky o sadomaso cuando el personal femenino agitó látigos en Frío y cuando una pareja cumplió con cierto ritual amoroso con los componentes enmascarados (se dio durante el mash up I am – I don’t care).
Tanto desprejuicio sólo se interrumpió con un medley melódico algo concesivo en el marco de este show narcisista y megalómano (pero con mensaje). Sucedió apenas pasado el meridiano del show, cuando se interpretan Fuego contra fuego / Te extraño, te olvido / Amor de mi vida, baladas de un pasado en el que a Ricky se le inventaban romances con chicas.
Detrás de escena, luz tenue, algunas velas, ambiente para meditar y estar tranquilo con su familia, fueron los únicos requerimientos de Ricky Martin para su escala en el Superdomo. Desde temprano en la tarde de ayer, más de 100 personas trabajaron en el armado del espectáculo, que ocupó 11 camiones para su traslado desde Uruguay, donde se presentó el fin de semana pasado. Ricky íntimo, convirtió los camerinos del domo cordobés en parte de su espacio personal y mantuvo absoluta reserva en el tránsito de personal y técnicos. Su mamá, su pareja y sus dos hijos, Valentín y Mateo, en el círculo íntimo que acompaña a la estrella durante el periplo del tour.
Esta noche, a las 21.30 y en el Orfeo Superdomo, Ricky Martin presenta la segunda fecha de la escala local de su gira, con localidades agotadas. Foto: La voz del interior