Los amigos de Gabriel García Márquez aseguran que el escritor colombiano perdió definitivamente la memoria, según difundieron los medios de ese país a partir de una entrevista que el pasado martes publicó el sitio Kien&ke.

En aquel portal, Plinio Apuleyo, amigo íntimo y coautor de “El olor de la guayaba”, contó que la demencia senil ya no le permite recordar los nombres de sus allegados ni reconocer a los amigos.

“Las últimas veces que hablamos repetía: ¿Cómo estás, cuándo vienes, qué estás haciendo? Muchos amigos, con quienes he comentado el asunto, me dicen que con ellos también se limitaba a iguales interrogantes. Entonces hay la sospecha de que simplemente tiene unas fórmulas. Si no reconoce no dice no sé quién eres tú, sino que hace unas preguntas genéricas. Me duele mucho esta situación y me inquieta. Gabo siempre ha sido un gran amigo”, relató Apuleyo.

El deterioro de la salud de García Márquez es lento y al parecer comenzó años atrás. Un golpe fuerte que recibió el escritor fue en 1999 cuando le detectaron un cáncer linfático que superó. Luego, en 2001, murió uno de sus hermanos, Gabriel Eligio García Márquez.

Gabo publicó “Vivir para contarla”, sus memorias, en 2002. En ese entonces trascendió que quería escribir más tomos, pero no lo hizo. Además, tenía ganas de terminar otro libro sobre amores contrariados, pero no hubo noticias sobre eso.

El escritor ya no opina sobre diversos temas como solía hacerlo. En 2007, cuando el Congreso del idioma celebró en Cartagena de Indias los 40 años de la publicación de “Cien años de soledad”, se dejó ver sonriente y vestido de traje blanco de lino. Sin embargo, en ningún momento habló en público ni concedió entrevistas. Fue en ese entonces cuando aparecieron los primeros rumores sobre los lapsus en la memoria del Nobel colombiano.

Más tarde, el británico Gerald Martin escribió la biografía oficial de Gabo, “Una vida”, en la que contó: “Con los apuntes adecuados era capaz de recordar la mayoría de las cosas del pasado distante (aunque no siempre los títulos de sus novelas) y entablar una conversación razonablemente normal, incluso divertida”.

Un año atrás, algunos medios publicaron que García Márquez estaba a punto de morir en París. Su mujer, Mercedes, y su agente, Carmen Balcells, desmintieron aquel rumor. Pero al parecer, la salud del escritor de 85 años se vio deteriorada desde entonces.