Con aplausos, lágrimas y vivas una multitud despide al Papa
Una multitud, estimada en 200.000 personas, abarrotó hoy la plaza de San Pedro para participar de la última audiencia general de Benedicto XVI, quien desde mañana a las 20 (horas de Roma) renuncia al pontificado.
Aplausos, lágrimas y vivas al Papa, pusieron color a una cálida jornada, en la que los fieles católicos manifestaron su incondicional adhesión al sucesor de Pedro.
“Ratzinger abrió su corazón, y sus frases en esta despedida fueron un testamento espiritual”, dijo un sacerdote citado por agencias internacionales.
Desde muy temprano en la mañana, grupos de personas de distintos países –muchos con banderas o pancartas con la palabras “gracias” en diversos idiomas- comenzaron a llegar por la Via de la Conciliazione hasta el Vaticano.
Minutos antes de las 11, los acordes de un órgano anunciaban la llegada de Benedicto XVI, quien hizo un recorrido más amplio al habitual en el papamóvil para saludar a la multitud.
Agencia AICA