Del 10 al 21 de abril se realizará la 15ª edición del Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente, con una grilla de más de 400 películas en once sedes. En conferencia de prensa, el ministro de Cultura porteño Hernán Lombardi y el nuevo director del festival, Marcelo Panozzo, rescataron la tarea del anterior director, Sergio Wolf, y comentaron novedades como la incorporación de nuevos espacios -el Village Recoleta reemplaza al Hoyts Abasto-, que incluyen dos salas del Centro Cultural San Martín y el Anfiteatro del Parque Centenario (al aire libre, gratis). En este último se exhibirá como apertura No, de Pablo Larraín, candidato al Oscar al filme extranjero, representante de la nueva categoría “País invitado”: en este caso, Chile.

No trata el plebiscito que dio en 1988 el puntapié inicial a la caída de Pinochet. Y la ‘invitación’ también involucra al documentalista Ignacio Agüero y al director Ernesto Díaz Espinosa.

La Competencia internacional cuenta con veinte producciones; tres son argentinas: Acá adentro, de Mateo Bendesky, Leones, de Jazmín López, y Viola, de Matías Piñeiro. Y por primera vez con un trabajo que también compite en el Baficito (la versión infantil del festival): Anina, animación del uruguayo Alfredo Soderguit. La sección abarca filmes de países como Alemania, España, Estados Unidos, Francia o Japón.

Quince películas (varias documentales) van a la Competencia argentina, entre otras las últimas de Raúl Perrone, Sergio Bizzio, Santiago Loza, Alejo Moguillansky y Marco Berger. La sección Cine del futuro se transformó en Vanguardia y Género, donde compiten cuatro argentinos y, entre otras obras, un documental del filósofo Sylvain George sobre el movimiento español del 15M.

Habrá retrospectivas-homenaje al argentino Adolfo Aristarain, el coreano Hong Sang-soo (premiado en los festivales de Mar del Plata y Cannes) y Julio Bressane, representante del cine experimental brasileño.

Fuera de competencia se podrán ver El olimpo vacío, documental sobre el escritor Juan José Sebreli; Los posibles, nuevo filme de Santiago Mitre (El estudiante); El gran simulador, sobre René Lavand; Maldita hija, de Stephanie Argerich (retrata viajes junto a su madre, la pianista Martha Argerich), además de Mundo grúa, opera prima de Pablo Trapero y cortos de su autoría: tres institucionales realizados especialmente para este festival y los de su anterior filmografía.

Los amantes de la música van a tener recitales en vivo y la proyección entre otras películas de Imágenes paganas, sobre el grupo Virus y Shut Up and Play the Hits, concierto de la banda neoyorquina LCD Soundsystem. Y para festejar los 15 años del festival, la Federación Internacional de Prensa Cinematográfica (FIPRESCI) eligió los 15 títulos locales más relevantes que se vieron en el BAFICI, y habrá un mercado de coproducción para promover la presencia en Cannes de trabajos nacionales en desarrollo.

El moño de cierre lo pone Al final del cuento, presentado por su directora, la francesa Agnès Jaoui (El gusto de los otros).