Celeste Cid para el infarto
La esperaban para que encabece la telenovela Lobo (en febrero de 2012), pero la salud no se lo permitió y Celeste Cid (29) tuvo su regreso triunfal como protagonista de Sos mi hombre en el prime time de El Trece. En pareja con Chano, el cantante de Tan Bionica, la actriz experimenta un buen momento personal y profesional que corona con la sensual y atrevida producción de fotos que hizo para la Revista SH.
En diálogo con la publicación, la madre de André Horvilleur (8) confesó que se mantiene informada respecto de lo que se dice de ella: “Es muy difícil estar al margen de eso, porque te enterás. A mí me pasa también de estar mirando televisión y me entero de otras cosas. También tengo Twitter y ahí es más tangible ver lo que sucede en el momento”. Además, aseguró que hoy se toma con más tranquilidad su trabajo, a diferencia del protagónico en Resistiré (2003): “Soy capricorniana y soy obsesiva -muy obsesiva- con mi trabajo. Siempre quiero que las cosas estén lo mejor posible… Ahora estoy en otro momento. Uno aprende que las cosas son como son y está bueno que así sea. La tele permite cosas más espontáneas también, no está tan programado”.
La escultural morocha, que se acomplejaba por los halagos de belleza, reveló: “No soy una persona que se considere linda, tiene que ver el cuerpo. Mi cuerpo atravesó muchos estados de peso y tengo ese registro mío en el que puedo ser muchas personas. Es muy ocasional. Hoy me entreno, voy a natación, me cuido y no tengo problema si tengo que engordar para un personaje. Me siento un instrumento de mi trabajo, no me siento una persona que vive para verse bien. Quizás un poco mi crisis era ésa, a veces el medio tiene una exigencia de verte bien que está por encima de lo que un personaje quiere contar”.
Enamoradísima de Chano, manifestó: “Encajamos muy bien porque tenemos una concepción del trabajo parecida. El ama mucho lo que hace y no sale a eventos a la noche… Somos dos personas muy tranquilas, no tenemos mucha vida nocturna y solemos ir a lugares sin mucha gente”. Una diosa con vida nueva.