Vanesa Carbone recibió una carta firmada por Raúl Andrés Sanhueza Carvajal, Cónsul General de Chile en Buenos Aires, en la que le piden disculpas por un insólito suceso que ocurrió en el Aeropuerto de Santiago en noviembre del 2012.

Según contó la modelo y conductora fue detenida de forma ilegal, interrogada e incomunicada por más de cuatro horas.

“Existió un completo abuso de autoridad contra mi persona”, relató la rubia. “Tenía toda la documentación en regla según la vigencia de la nueva ley”, aseguró.

“Los hechos no pasaron como los contaron en algunos programas de televisión: jamás hubo ningún grito, pelea o discusión ni por parte de ellos ni por parte mía, no existió pelea en ninguna cola con ninguna chica y jamás salió de mi boca ‘dejame a mí que estoy primera en la fila’, esos datos son incorrectos”, indicó.

“De hecho, el consulado chileno me envió una carta pidiéndome disculpas por lo que sucedió que fue un error, y me notificó que no había ningún impedimento ni en ese momento ni ahora para retornar al país, y además el cónsul chileno me llamó y me citó al consulado para informarme que el oficial de la policía del Aeropuerto de Santiago de Chile que me detuvo en forma ilegal fue separado de su cargo y enviado como castigo con un cargo menor a un aeropuerto del sur de Chile“, relató Carbone.

“Lo que me pasó fue grave”, puntualizó la actriz. “Un oficial de la policía del aeropuerto me detuvo en forma ilegal y con un procedimiento más que extraño e incorrecto, me encerró en una oficina por el término de cuatro horas sin informarme y negándose a decirme cuál era el motivo de mi detención, me interrogó, se negó a identificarse, me manoteó mi teléfono celular y cortó una llamada cuando intenté pedir ayuda y me obligó a firmar una hoja donde decía que me comprometía a no levantar cargo alguno contra su persona”, agregó Vanesa.

“Gracias a un momento que se fue y que había dejado mi teléfono en el escritorio, logré llamar a mi mamá y ella se comunicó con el Consulado“, contó.

“Gracias al cónsul que hizo un rápido accionar y su muy buena gestión ante tamaña irregularidad, llamó al aeropuerto y les pidió que lo informen sobre cuál era el motivo de mi detención y le dijeron que no estaba detenida y los obligó a que me dejaran volver tranquila a Argentina“, indicó.

“Gracias al cónsul terminó mi calvario de cuatro horas en manos de quienes se suponen que tienen que cuidarte, que estaban llevando a cabo una detención irregular“, detalló.

“Fueron las peores horas de mi vida en manos de un desconocido que me privó de mi libertad sin justificativo”, expresó Carbone, quien agradeció nuevamente “la gestión del cónsul porque gracias a él nunca más le va a pasar esto a nadie“.