Con una portada luminosa y evocadora, con un argumento que llama a la curiosidad, Courtney Miller Santo, nos retrata cinco mujeres, todas de la misma familia, cinco generaciones que en algún momento viven en la misma casa. Un genetista se pone en contacto con ellas, intrigado por la longevidad de las mujeres Keller y sobre todo por su excelente salud y lucidez, teniendo en cuenta que Anna, la mujer más vieja del mundo, ha superado con soltura los cien años. Pero detrás de esa peculiaridad, las mujeres de la familia Keller esconden sus secretos.

Se destaca en la novela la intrincada red de emociones que la autora teje entorno a sus protagonistas, porque todas las mujeres Keller tienen sus páginas donde cuentan su historia. A lo largo de las diferentes tramas, vemos como los sentimientos afloran entre ellas, los roces, los reproches, las carencias o los silencios, porque Las raíces del olivo habla de las complejas relaciones entre madre e hija, en este caso agudizado por el hecho que varias generaciones conviven en la misma casa y cada una de ellas ve en las demás sus propios errores del presente o el pasado.

Todo transcurre en un olivar que dio vida a toda la zona cuando el padre de Anna llegó de Australia con olivos que plantó e injertó en los ya existentes. Todo parece girar en torno a ese lugar y esos árboles centenarios. Los sentimientos hacia la propiedad son dispares, algunas lo ven como el único hogar que desean u otras como una cárcel.Courtney Miller Santos ha sabido recrear la magia del lugar, convertirlo en un personaje más de la historia con los justos detalles y descripciones sobre el cultivo de la oliva, pero realzando la belleza de esos árboles y las propiedades de sus frutos.

Las protagonistas son Anna, la centenaria de la familia, emigrante que llegó a Estados Unidos desde Australia; su hija Bets, cuyo marido vive en un geriátrico aquejado de un Alzheimer; su nieta Callie, que arrastra la frustración de no haber vivido la vida que deseaba por un accidente que le dejó una grave lesión en una pierna y la obliga a depender de la acción de los calmantes. También su biznieta Deb, condenada a cadena perpetua por un asesinato y a punto de conseguir una posible libertad condicional; y finalmente Erin, la hija de Deb, criada por las ancianas, bajo la sombra de lo que hizo su madre, la única que ha conseguido vivir su sueño lejos de la propiedad, y que regresa inesperadamente embarazada y sin rastro del padre.

De todas estas protagonistas, Anna se destaca: es una mujer que ha vivido más de ciento diez años y llega a ser la mujer más anciana del mundo. Se siente orgullosa de su longevidad, pero su vida no ha sido un camino fácil. Anna es fuerte, el pilar de la familia, no exenta de defectos, pero consciente de que las mujeres Keller son especiales. Es la historia viva de la zona y su extrema lucidez la convierten en un personaje irónico, muy observador y complejo. Bets es otro personaje encantador, por su historia personal, su secreto, su tristeza por ser testigo de cómo su marido se pierde en un mar de confusión y olvido. En el caso de Callie, su personaje es la que vive la vida y el hoy, sin importar el mañana o el ayer. Deb está condenada por la justicia a cadena perpetua por asesinato y sufre por no haber podido criar a su hija Erin. Esta última aparece sorpresivamente por Hill House embarazada y atormentada por sus miedos. Todas hacen de esta novela una hermosa postal de la vida en familia. Todas se ayudan y se cuidan, intentan limar asperezas. Esto último es una de las cosas más valiosas que tiene esta prosa, ninguna familia es perfecta. Descubran el mundo de las mujeres Keller, es una novela muy ágil e interesante.

Además “Las raíces del olivo”está basada en la propia historia de la autora: su bisabuela murió con 104 alcanzando a conocer la quinta generación de su familia, y los olivares fueron el escenario de su niñez.

Sinopsis:

La familia Keller está formada por cinco generaciones de mujeres que viven en una gran casa, en medio de un olivar del valle de Sacramento. Anna, la matriarca, tiene ciento doce años y está decidida a convertirse en la persona más anciana del mundo. Comparte la vivienda con su hija Bets, de noventa años, su nieta Callie, de sesenta y cinco, su bisnieta Deb y su tataranieta Erin. Las dos mujeres mayores lucen más jóvenes de lo esperable y desafían los límites de la longevidad, y ello ha captado la atención de un genetista convencido de que tienen la clave que permitirá alterar el proceso de envejecimiento.

Pero Anna no quiere desvelar los secretos de las Keller. Como ella, cada una de las mujeres de la familia esconde su auténtica naturaleza. La llegada del genetista y el regreso al hogar, sola y embarazada, de Erin, la más joven, despertará emociones explosivas y destapará verdades ocultas.

Páginas: 359. Editorial: Ediciones B