Katy Perry compartió aspectos íntimos de su vida en una entrevista para GQ. La cantante estadounidense de 29 años que es portada en el número de febrero de la publicación, reveló que perdió su virginidad a los 16 años en el asiento delantero de un auto, mientras escuchaba el disco Grace, de Jeff Buckley. “Amo tanto ese disco”, bromeó la californiana.

Sobre su cuerpo, comentó que de chiquita rogaba a Dios para tener pechos grandes. “Decía: ‘Dios, ¿podrías dejarme tener senos tan grandes que no pueda ver mis pies cuando esté acostada?’ Dios respondió a mis oraciones”, comentó.

La intérprete de “Teenage dream” contó además que cree mucho en la astrología y en los extraterrestres.