El actor Alfredo Félix Alcónfalleció esta madrugada en su casa a los 84 años, según confirmó su amigo personal Jorge Vitti. El prestigioso intérprete estaba recuperándose de una importante operación a la que había sido sometido hace cuatro meses en La Trinidad.
Sus restos ya fueron retirados del domicilio ubicado en la calle Cerviño 3886 y serán velados desde las 15 en el Congreso de la Nación, que permanecerá abierto durante toda la noche. Ya por la mañana del sábado, le darán el último adiós en el Cementerio de la Chacarita.
A poco de conocerse la noticia, actores como Norma Aleandro y Nicolás Cabré fueron a su departamento a acompañar a la familia. Durante los últimos días, también lo hicieron Juan Gil Navarro, Joaquín Furriel, Peto Menahem y Adrián Suar entre otros. Alfredo Alcón Fue protagonista de una de las películas más taquilleras de la historia del cine argentino,Nazareno Cruz y el lobo, en 1975, bajo la dirección de Leonardo Favio. También tuvo un rol principal en los filmes Los inocentes (1964),En la Ciudad sin límites (2002), El santo de la espada (1970), La maffia(1972), Los siete locos (1973) y Boquitas Pintadas (1974).
Entre muchos otros galardones, obtuvo el premio al mejor actor en el Festival Internacional de Cine de Cartagena por Los siete locos, y el premio Cóndor de Plata al mejor actor por sus sendos protagónicos en Los inocentes y Martín Fierro. En 2005 la Asociación de Cronistas Cinematográficos de la Argentina le otorgó el Premio Cóndor de Plata a la trayectoria.
En las últimas semanas, cuando su salud se había complicado, rodeado de amigos y colegas como Graciela Borges y su representante Alejandro Vanelli. Joaquín Furriel también estuvo cerca de su familia. Él, con Roberto Castro y Graciela Araujo, fueron los compañeros de Alcón en Final de Partida, la obra de Samuel Beckett, que en los primeros meses de 2013 realizaron en la Sala Casacuberta del Teatro San Martín.
Una vida de película
Alcón transitó más de 50 años de su vida entre cine, teatro y televisión. Así hizo crecer su figura hasta convertirse en el actor más destacado del país.
El amor nunca muere, hecha en 1955 y en la que trabajó con Mirtha Legrand y Tita Merello, entre otros, fue el puntapié de una carrera que incluye más de cincuenta trabajos para la pantalla grande. Alcón fue dirigido por Leopoldo Torres Nilson: se puso a sus órdenes en Un guapo del 900, Martín Fierro, El santo de la espada, La Maffia y Boquitas pintadas, entre otros films. También fue parte de Nazareno Cruz y el lobo, la película de Leonardo Favio. Hizo coproducciones con España (Los Inocentes y Últimas Imágenes del Naufragio) y tuvo al ganador del premio Oscar Juan José Campanella como director (El Hijo de la novia). Además, interpretó a un travesti para Cohen vs Rosi, una de las primeras producciones de Pol-ka en cine.
El teatro también fue una pata fuerte de su trayectoria, incluso con una parte hecha en España. Actuó obras de Williams Shakespeare (“Rey Lear” y “Hamlet”), Federico García Lorca (“Los caminos de Federico” y “Yerma”), Arthur Miller (“Las Brujas de Salem” y “La Muerte de un Viajan”), Ingmar Bergman (“Escenas de la vida conyugal”) y Tennessee Williams (“Orfeo desciende”), entre otros autores, en algunas de las salas más importantes de Buenos Aires. También se desempeñó como director teatral.
Su participación en TV comenzó con versiones para la pantalla chica de obras teatrales en Noches de Teatro y El Teatro de Alfredo Alcón. Sobre el final de su carrera, sus trabajos fueron todos para Pol-Ka, la productora de Adrián Suar. Por el nombre de Dios, Vulnerables, Locas de Amor y Herederos de una venganza.