Oscar Mediavilla habló de su salud desde Madrid: “¡No tuve un infarto!
En medio de rumores, el productor musical habló con la prensa del malestar físico que lo llevó a estar internado un día en Málaga.
En medio de un viaje de placer y de trabajo, Oscar Mediavilla (60) tuvo un malestar físico que lo llevó a estar internado, durante un día, en un hospital de Málaga.
Tras el episodio médico, comenzaron a circular versiones en Twitter que indicaban que el productor musical -que se encuentra en Europa con su mujer, Patricia Sosa-, había sufrido un infarto y que había sido operado.
Minimizando la situación, Mediavilla le contó a la prensa que lo contactó cómo se encuentra y qué es lo que le pasó. “Tenía una pequeña angina de pecho. No pasó nada, está todo tranquilo. ¡No tuve un infarto! Fue un dolor de pecho. Me dieron unos medicamentos y me pidieron que haga régimen… Ya tuve en otra oportunidad un síntoma similar. Mucho estrés, mucho colesterol y me dieron una mediación, una dieta. Estoy bien”, señaló, transmitiendo tranquilidad en su oratoria.
Luego, Oscar Mediavilla relató puntillosamente cómo fue que comenzó a sentirse mal y la práctica que le realizaron los médicos, quienes lo examinaron de pies a cabeza.
“El dolor lo empecé a sentir porque cargué muchas valijas en el aeropuerto. Cuando tomé el avión en Italia, para Málaga, me seguía doliendo y le dije a Patricia que vayamos al hospital cuando llegásemos. Estuve en el Hospital Xanit, que es como la Nasa, un lugar espectacular. Ahí permanecí en observación un día, me pusieron cables, me hicieron un cateterismo, pero no pasó nada. No me infarté, no me cambiaron el corazón, no me pasó nada. Sí me dieron una medicación para que la sangre fluya mejor, entre otras cosas, para que no ocurra un episodio grave. Tenía todas las venas bien. Esto me pasó 50 veces, son todas cosas del estrés”, describió, permitiéndose suavizar el episodio con variadas muestras de humor: “Si querés te bailo”, agregó.
Con un panorama menos alarmante, el músico asumió que los médicos le aconsejaron que lleve una rutina diaria más tranquila. “Me pidieron que tenga una vida más sedentaria, hay que bajar la intensidad. Estos días estuve muy nervioso, lo del Papa fue muy fuerte… Los entretelones, hubo mucha emoción… Pero no tengo nada grave ni dramático. Es más, recién vengo de caminar una hora y de hacer notas con Patricia, por su próximo show”.