Sobre las tablas del teatro Mar del Plata, Guillermo Francella comenzó los festejos por sus 60 años. La encargada de sorprender al artista fue nada menos que su hija Johanna quien al finalizar la función subió a cantarle el feliz cumpleaños, torta en mano.

Para un actor no hay mejor forma que celebrar la vida que arriba del escenario. Y así fue para Francella, un querido artista argentino.

El sábado, Guillermo cumplió 60 años y cuando terminó la función de “Dos pícaros sinvergüenzas” obra que protagoniza junto a Adrián Suar su hija Johanna irrumpió el escenario al ritmo de “que los cumplas feliz”.

Con todo el elenco y el público de pie, Francella sopló las velitas y comenzó sus seis décadas a pura emoción.