Serrat vuelve a la Argentina para presentar su “Antología desordenada”
“Lo realicé personalmente con una disciplina absoluta, sin ninguna discográfica detrás” dijo en charla con Télam y anunció que vendrá a presentarlo desde el viernes 6 de marzo con una serie de recitales en distintos puntos del país y que se extenderán hasta el 13 de abril.
Una caja con cuatro discos es el container de “Antología…”, pero el artista que estrenó en público su itinerario poético dentro del estudio Toreski de Radio Barcelona en 1965, duda al intentar dar cuenta del proceso creativo porque, “cómo hacer para explicarlo, fue arrancar una historia que yo no sabía cómo, dónde iba a ir a parar”.
Serrat hace pausas -teléfono mediante- y calibra cada palabra al explicar el riesgo del proyecto ya que, “no se trata de una junta de canciones, de hacerlas tal y como suenan, los temas están vueltos a grabar con los sonidos actuales, con la voz que tengo ahora, es una revisión”.
Aunque durante el diálogo desliza que, “los campesinos y los mineros trabajan más y están menos recompensados que yo”, al mencionarse el esfuerzo implícito en “esto que se ha ido haciendo, porque fueron 6 meses desde que entré al estudio hasta que entregué el material, pero existió toda una época anterior de preparación, de contactos por mail y teléfono”.
El autor de más 600 canciones, muchas de ellas grabadas en el imaginario de legiones, 60 álbumes y preciso hacedor de homenajes a poetas hispanos como Miguel Hernández, quien murió a los 31 años en las cárceles franquistas y al gran Antonio Machado, descartó lo cronológico como criterio para la selección de este repertorio.
“Es una celebración de 50 años de vida artística, de conciertos y canciones, y lo hago a partir de cincuenta temas, buena parte de ellos acompañado por amigos quienes festejan conmigo la efeméride”, detalla el responsable de la canción “Malas compañías”, tributo musical a la amistad.
Serrat, coherente con los dichos de esa letra, se enorgullece al subrayar que la presencia de los 31 invitados, como su histórico arreglador, el maestro Ricardo Miralles, el poeta cubano Silvio Rodríguez, su cuate Joaquín Sabina, y el grupo argentino Les Luthiers -que irrumpe con sus extraños instrumentos en esta canción-, se basa en “la relación personal”.
“Todos los que están -continúa-, están por razones muy concretas, ninguno por hacer bulto, pensé, elaboré quién hacía cada tema, agradezco la generosidad de los artistas y también cómo han enriquecido las canciones, no ha habido que empujar más de la cuenta “.
Dentro del elenco de letras seleccionadas del trabajo musical, se encuentra la linda versión de “Aquellas pequeñas cosas” realizada junto a Mercedes Sosa.
El poeta catalán se entusiasma y regala el adjetivo “brillante” a la posibilidad de pasar más tiempo en Buenos Aires, desde el viernes 6 al sábado 14 de marzo en el teatro Gran Rex, para luego desarrollar una extensa gira por el país.
En su derrotero, visitará Mendoza el lunes 16; el miércoles 18 estará en Neuquén; el sábado 21 y el domingo 22, se presentará en La Plata; el martes 24 y el miércoles 25 hará de las suyas en Rosario; el viernes 27 cantará en Córdoba; mientras que el sábado 4 abril tocará en Mar del Plata; el viernes 10 y el sábado 11 estará en Tucumán, y cerrará la gira en Salta, el lunes 13 de abril.
Aunque no hay precisiones acerca de invitados posibles para sus fechas aquí, el músico Ricardo Mollo se ocupó de reunir a un numeroso grupo de cantantes argentinos bautizado Resaca sudaca.
Víctor Heredia, León Gieco, Celeste Carballo, César Isella, Patricia Sosa, Adriana Varela, Alejandro Dolina junto a Mollo integran la banda que grabó la versión de “Fiesta” en el disco, y se espera que varios de ellos puedan acompañarlo sobre el escenario.
Tanto despliegue de acordes y poesía alejan los fantasmas de un posible retiro, y consultado al respecto, el artista envuelve la respuesta en una risa socarrona y concluye, “yo llegué discretamente a esto y me iré discretamente”. (Télam)