Explotó BOU y es la nueva estrella de Futbol para todos
La cifra asusta: lleva convertidos 16 tantos en 20 partidos con la camiseta albiceleste (0,8 goles por encuentro). El hombre de la estadística es, también, el nombre del gol. Se llama Gustavo Bou, y pasó del ostracismo en River, el club que lo formó y dejó libre, al estrellato en Racing, la entidad para la que convirtió el gol 100 en la Copa Libertadores ; la institución en la que a fines de 2014 gritó campeón.
Los tres festejos frente a Guaraní certifican su vigencia y todo lo bueno que había insinuado en el último torneo. Es el Rey Midas del ataque de Racing. Cuando la pelota deriva en Bou hay aroma de gol. Lo certifican más números: anota un gol cada 112 minutos. Avellaneda ya es una bisagra en su carrera: hasta incluir a la Academia en su currículum, Bou había anotado apenas 18 goles en 100 partidos (0,18 por encuentro).
El estrellato no vino gratis. Bou estuvo a punto de dejar el fútbol, cuando los goles no eran costumbre y las puertas se le cerraban. River, el club que lo había formado, no lo tenía en cuenta. Llegaron el fútbol ecuatoriano, Gimnasia y Esgrima La Plata y Olimpo . Con ellos, la resurrección. Hasta que apareció Racing y Bou explotó.
Los goles le valieron que Víctor Blanco, el presidente, le comprara el pase. La noticia pasó inadvertida, pero el día en que Racing le ganó 1-0 a Godoy Cruz hubo celebración doble. Por un lado, todo el público académico festejó el título. Por el otro, los dirigentes chocaron las copas porque ese domingo, antes de que la pelota comenzara a rodar, se cerró la adquisición del 50% que faltaba de la ficha del delantero. Fue un trámite exprés.
Los astros parecen encolumnados detrás del hombre del gol. Al brillante momento con la pelota le suma una alegría personal, a los 25 años: dentro de un mes nacerá su primera hija. Por eso, el primer gol que anotó como jugador de Racing (frente a Newell’s) tuvo una dedicatoria especial. Tomó la pelota y la escondió debajo de la camiseta. Fue una ofrenda para Marisol, su mujer embarazada.
“Está viviendo un momento fantástico y me alegra. Es un chico simple, un luchador del fútbol”, dice Juan Carlos “Chango” Cárdenas, toda una autoridad en materia de goles con la camiseta de Racing: anotó el más célebre de toda la historia, aquel que sirvió para ganar la única Copa Intercontinental ante Celtic, de Escocia. “Le veo cosas mías”, aporta el Chango. “Yo me movía así, por todo el frente de ataque, y no tenía problemas de perfil. Además, Bou está confiado con la pelota y es solidario con los compañeros: no es fácil conjugar todo eso”, agrega.canchallena.com