Una creación periodística de Luis Pedro Toni

La artista que confesó su adicción

Poco se sabía de la vida privada de Maitena, la prolífica historietista que en los 90 fue furor y una suerte de punta de lanza de una explosión feminista en la Argentina. Publicó su primera novela, Rumble, en homenaje a su madre, y devela algunos secretos de su historia, en una entrevista con La Nación.

A los 17 años fue madre de su primera hija. A los 18, se casó. A los 19, tuvo a Juan, su segundo hijo, y a los 21 tuvo una nena que murió en el parto. “Fue muy feo. Muy, muy feo. Tardé muchos años en darme cuenta de lo heavy que había sido”, relata a corazón abierto. “Cuando se murió mi hija no se habló más del tema. Yo vuelvo al sanatorio y habían sacado el moisés, regalado la ropita…, ya no había nada. ‘Esto no pasó'”, recuerda. “Tuve problemas con el alcohol y en algún momento lo relacioné con todo esto”, agrega, reflexiva. “Creo que esa pérdida a los 21 años disparó todo. No hablaba, pero agarraba una botella de whisky y la bajaba entera. Buscaba el olvido”.

Maitena dejó de dibujar en 2006, un año que reconoce como bisagra en su vida. Dejó de tomar alcohol, de fumar y comenzó a escribir. “Dejé un año, me gustó y lo seguí dejando. Estuve un tiempo sin hacer nada -explica- Me puse a escribir y me di cuenta de que no necesitaba dibujar”. 

Dejar de dibujar para ella fue “un desafío”: “Tenía una confusión con el personaje. Tiene lo suyo transformarse en alguien famoso. De alguna manera trabajás de ese personaje, hay una dualidad medio peligrosa”.

¿La escritura, una nueva adicción? “Yo soy adicta. A lo que sea. Me encanta el alcohol, pero no extraño. Todos los que tienen problemas tienen que intentar parar. Es muy duro, pero lo que hay después está buenísimo. Y hay una edad en la que ni el cuerpo ni la cabeza te aguantan. Entonces, está bueno dejarlo en ese momento para llegar bien, porque falta mucho. Lo que uno no entiende a los 25 años es que el partido es muy largo. Y no es una carrera de quién llega más rápido, es de resistencia”, concluye.