La vedette Victoria Xipolitakis y los pilotos Federico Soaje y Patricio Zocchi fueron procesados en la causa que se abrió por la difusión de un video en el que se ve a la mediática en la cabina del vuelo AU 2708 de la empresa Austral, que el 22 de junio pasado despegó de la Ciudad de Buenos Aires y aterrizó en Rosario.

El fiscal Carlos Rívolo, el mismo que investigó la tragedia aérea de LAPA en la que 65 personas murieron a poco de despegar del Aeroparque Jorge Newbery el 31 de agosto de 1999, había requerido que inicie la investigación y el juez federal Sergio Torres confirmó el procesamiento. También les trabó un embargo de 250 mil pesos a cada uno.

Los tres implicados están acusados de violar el artículo 190 del Código Penal, que castiga con prisión de 2 a 8 años al que “ponga en peligro la seguridad de una nave”.

El abogado de Vicky Xipolitakis, Fernando Burlando aseguró a Teleshow que recurrirá el fallo. “Aún no fuimos notificados formalmente aunque sí estamos al tanto de este procesamiento. Sabíamos que era una posibilidad, pero vamos a apelar, porque hay cuestiones que no compartimos con el juez”, comentó. “De todas maneras siempre dije que esto se solucionaba en un juicio oral, no antes”, concluyó.

En el video se ve a Xipolitakis en la cabina de mando junto a los dos pilotos, quienes le enseñan, entre otras cosas, cómo acelerar en pleno despegue, uno de los momentos más críticos del vuelo. Apenas conocido el video, los conductores fueron despedidos y sus domicilios fueron allanados.

La vedette fue invitada a la cabina por el piloto, quien lo admitió. El conductor y su copiloto lo reconocieron, pero negaron que ello haya puesto en peligro la aeronavegación o que se hayan salido de los protocolos de vuelo. Ni bien se conoció el video, fue la empresa Austral quien realizó la denuncia.

Detalles del procesamiento

“De lo hasta aquí relatado, se puede advertir como de trascendencia, cuanto menos, que tras la invitación de Zocchi y con la anuencia de Soaje, Xipolitakis permaneció dentro del cockpit, que se mantuvo cerrado, durante todas las etapas del vuelo. En exceso incluso del reconocimiento de la pasajera como de carácter VIP”, concluyó Torres en su fallo.

En la resolución de 98 carillas, el juez valoró que la permanencia de Xipolitakis en la cabina “aconteció durante todas las etapas del vuelo, sino esencialmente, la conducta que mantuvo y que los pilotos no sólo consintieron sino incluso fomentaron”, así como en el despegue y aterrizaje del avión.

También tuvo en cuenta que durante el vuelo, Xipolitakis utilizó su teléfono, la aplicación Whatsapp, “en momentos inmediatos al despegue y aterrizaje”. Y que en el instante mismo del despegue de la aeronave, la modelo “acciona uno de los comandos del cockpit”. Llegó a esa conclusión luego de evaluar los diálogos del video, entre Xipolitakis y los tripulantes: “ahí por ahora”, “ahí aguantá” o “cuando yo te diga le das un poquito para adelante”.

En la resolución, Torres sugirió algunos puntos para la seguridad aérea. “Considero oportuno recomendar la restricción de las facultades del Comandante en cuanto a determinar la admisión de pasajeros en la cabina de mando y, de la tripulación en general, para habilitar la ubicación de pasajeros VIP en asientos que no corresponden a la clase de su boleto de embarque”, advirtió.

En el caso, Torres concluyó que “se dejaron de lado las acciones propias de una profesión tan delicada, para con toda liviandad y alboroto, transformarlo en un irresponsable juego cuasi-mediático”.