El actor Roberto Begnini presentó el libro de Francisco
El papa Francisco advirtió que la corrupción se elevó a sistema, pidió no marginar a las personas homosexuales y se refirió a la posibilidad de permitir la comunión a los divorciados en nueva unión, en el primer libro-entrevista de su pontificado publicado hoy en 86 países.
En la obra, editada por Planeta, el Papa sintetizó las prioridades de su pontificado y fundamentó sus respuestas en la necesidad de la compasión para vencer la globalización de la indiferencia, y en las obras de misericordia, a las que consideró la “piedra angular” de los cristianos.
“Hay que hacer una diferencia entre el pecador y el corrupto. El primero reconoce con humildad ser pecador y pide continuamente el perdón para poderse levantar, mientras que el corrupto es elevado a sistema, se convierte en un hábito mental, en un modo de vida”, sostuvo el pontífice.
“El corrupto es quien peca, no se arrepiente y finge ser cristiano. Quien se lamenta por la escasa seguridad en las calles, pero después engaña al Estado evadiendo impuestos, con su doble vida, escandaliza”, aseveró, y agregó: “Pecadores sí, corruptos no”.
Al ser consultado sobre la discriminación de las personas homosexuales en la Iglesia, el Papa repitió la frase que pronunció en el vuelo de regreso de Brasil en julio de 2013: “Si una persona es gay, busca al Señor y tiene buena voluntad ¿quién soy yo para juzgarla?”, se preguntó.
En este sentido, Francisco recordó que el Catecismo de la Iglesia Católica explica que las personas homosexuales “deben ser tratadas con delicadeza y no deben ser marginadas”, y destacó que se hable de personas homosexuales, porque “primero está la persona, con su dignidad. La persona no es solo definida por su tendencia sexual”.
Francisco insinuó en el libro su intención de posibilitar la comunión a los divorciados en nueva unión, un tema que suscita controversias dentro de la Iglesia, al poner como ejemplo el caso de una sobrina.
“Tengo una sobrina que se ha casado por lo civil con un hombre antes de que éste pudiera obtener la nulidad matrimonial. Querían casarse, se amaban, querían tener hijos, de hecho han tenido tres”, planteó.
“Este hombre era tan creyente que todos los domingos, cuando iba a misa, iba a confesarse y le decía al sacerdote: ‘Sé que usted no me puede absolver, pero he pecado en esto y en esto otro, déme una bendición’. Esto es un hombre religiosamente formado”, reflexionó.
En la presentación del libro-entrevista en Roma, el actor italiano Benigni aseguró que Francisco “está llevando a toda la Iglesia hacia el cristianismo”.
“De pequeño quería ser Papa”, bromeó el protagonista de la película “La vida es bella”, antes de realizar una reseña del libro con las conversaciones que el pontífice argentino mantuvo con Tornielli.
“El quicio del pontificado de Francisco es la misericordia, que no debe confundirse con la piedad. La misericordia incluye la alegría, la facilidad para perdonar. Y la alegría es el gran secreto del cristianismo”, subrayó el actor.
El libro-entrevista lleva la firma del Papa en la cubierta de las ediciones en italiano, español, francés, inglés y portugués, y se articula en nueve capítulos