Nicolás Cabré habló sobre su presente laboral y personal e hizo sus consideraciones acerca de cómo ve “el ambiente” del espectáculo en la actualidad: “Amigos en el ambiente no tengo”, confesó.

En nota con La Once Diez/Radio de la Ciudad, en el programa de Pablo Gorlero, el actor repasó los últimos años de trabajo y recordó: “Hacía un año y medio largo que no tenía una pausa en todo sentido, necesitaba parar un poco. Salió lo de Variaciones Walsh que era algo que yo necesitaba, era un trabajo enfocado en otra cosa, un las preocupaciones eran otras, no había tema rating”.

Asimismo, destacó la exigencia de horas de trabajo en la televisión: “Ahora también es diferente con el teatro. Y si me decís ahora que tengo que hacer 12 horas de televisión no sé si tengo tantas ganas”.

“Hoy está muy salvaje todo, tenés que estar hablando todo el tiempo, pero son formas que van surgiendo. No existe el respeto hoy, ni se entiende que no todos tenemos ganas de abrir la puerta de nuestra casa. Muchas veces escudándose en el ‘la gente quiere saber, decile a tu público’, te faltan el respeto, amenazan, me dicen que trato mal”, criticó.

Acerca de la obra que se encuentra protagonizando en el teatro Lola Membrives, “El Quilombero”, afirmó: “La pasamos muy bien, estoy agradecido y me siento privilegiado. Con la situación hoy por hoy como está, que la gente decida pagar una entrada y que seamos un éxito es más que un privilegio”.

De esta forma, contó que al hacer teatro tiene más disponibilidad en su vida: “Este momento de mi vida, me permite tener la posibilidad de tener más vida privada. Mi hija, por ejemplo, ya empieza el jardín, el teatro me permite pasar más tiempo con ella, en este momento de su vida que es fantástico”.

Por último, admitió: “Siempre quise ser padre de una nena, se me dio todo, hoy estoy  viviendo mucho más de lo que imaginaba. Ella vino a los ensayos, pero es difícil tenerla del lado del escenario porque habla mucho”.