Hace unos días tuvo lugar la presentación de la película y los actores charlaron con la prensa. En el inicio, Valeria no mostró piedad al anunciar que el título final le disgustó mucho: “Me parecía, no sé si decirlo, con las palabras que usé. No me gustaba para nada, y hubo dos bandos, yo tenía mi gente que pensaba como yo. Pero al final de la filmación, estaba muy feliz y me convencieron, y decidí regalarles el ‘alegrón’ de que pongan ese horrible título”. La historia de “Me casé con un boludo” se centra en dos actores, Fabián Brando y Florencia Córmik, que se enamoran y deciden casarse, pero ni bien firman los papeles, Flor se da cuenta que se enamoró del personaje que interpretaba Fabián y se ven enredados en una historia de mentiras y la necesidad de no decepcionar al otro, que termina en el camino contrario al planeado. El calificativo del título es contundente y por ello la relación entre la actuación y la “falta de luces” sale a relucir todo el tiempo en la conferencia. “Lo de boludo lo vengo llevando hace tiempo muy bien. Con respecto a creérmela, uno lucha todo el tiempo con eso, uno trata de no emborracharse en el ego, pero no me preocupa, lo llevo -con altibajos, algunas recaídas-”, comenta un muy bromista Suar, en parte feliz por la presentación, pero muy cómplice con su pareja protagónica. Suma que “hay que definir bien la palabra ‘boludo’. Porque hay muchos perfiles de boludo, puede ser en diferentes formas. Gracias a mi rol dividido entre actor y empresario, no te digo que dejé de ser un pelotudo, pero estar de los dos lados seguramente me ayudó a crecer como persona. Desgraciadamente, el ADN del actor lo tengo, así como muchos de sus clichés”.

Bertuccelli, que confiesa ser parecida a su personaje, en cuanto a la inseguridad y trabajar mal bajo presión, habla de las diferencias con el primer filme que los tuvo como protagonistas: “Buscamos que el peso recaiga en Adrián, adrede, porque de hecho pensamos mucho en distanciarnos de los personajes de la Tana y de Tenso”. Adrián, en tanto, tras comentar que la idea original para el filme -que luego iría mutando- fue de Vale, insistió con que “el desafío más grande fue liberarnos de esos personajes”. Diarioshow