Una creación periodística de Luis Pedro Toni

DEL POTRO puso en alto al tenis argentino

RÍO DE JANEIRO — No tuvo respiro. Apenas 15 horas después de haber dado el gran golpe del torneo olímpico de tenis, Juan Martín del Potro volvió a tener acción en singles. El argentino, aún más gigante que su espigada figura, venía de eliminar nada menos que al serbio Novak Djokovic, Nº1 del mundo, en primera ronda y pese al desgaste volvió a dar otro paso en Río de Janeiro. El ex-Top 4 del mundo derrotó al portugués Joao Sousa por 6-3, 1-6 y 6-3 para avanzar a octavos de final.

Otra vez en la cancha principal, salió al ruedo La Torre de Tandil, ubicado 141º en la clasificación sólo por su prolongada inactividad y su vuelta al circuito en febrero. El saque fue el máximo aliado del tandilense en el arranque, ya que empezó tenso de piernas y de a poco se fue soltando. Cedió su saque en el tercer game, pero enseguida lo recuperó. Y llegó una interrupción obligada, de algunos minutos, ya que se armó una pelea entre dos espectadores en las tribunas, uno argentino y otro brasileño.

Mientras, los jugadores, los verdaderos protagonistas del show, miraban sin entender razones. Y retomaron a pleno. Sin poder pegar la terrible derecha como frente a Djokovic, Del Potro fue más regular que el luso y concretó otro quiebre, en el octavo juego, para luego llevarse el primer set, en el que conectó ocho aces. Allí el sudamericano demostró su mayor presencia y categoría.

Muy estático, el segundo parcial fue otra historia, muy distinta. Del Potro entregó dos veces el servicio, en los juegos cuarto y sexto. En la primera ocasión fue con una doble falta en la red, un ejemplo claro de lo que le costó físicamente después de la intensidad mental y corporal del triunfazo contra Djokovic en la noche previa.

Para deleite de sus fanáticos, el argentino volvió a mostrarse más efectivo y con pimienta en su potentísimo drive. Sabía que ya el tercer set era a todo o nada. Y fue suyo , gracias a un rompimiento clave en el sexto juego, siendo letal con la derecha en ciertos pasajes, como en la noche del batacazo histórico. Así fue como desequilibró a un rival rápido, bastante completo, pero inestable en el rubro psicológico. Sin dudas, pesó la mayor jerarquía del tandilense, que ratificó lo hecho en el debut olímpico. No pudo rematar las dos chances de rotura en el octavo y lo selló en el siguiente juego, con su servicio.

El campeón del US Open 2009, hazaña que le permitió alcanzar el Nº4 del mundo, dijo que sólo aquella proeza en el Grand Slam de Nueva York superó este impacto sobre Djokovic. Y hay que tener en cuenta que justamente el argentino logró el bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, al derrotar justo al serbio en esa definición.

Sin dudas, esa medalla fue memorable en su carrera, pero ahora Del Potro le da un enorme valor a este triunfo sensacional sobre Djokovic en Río ya que viene sufriendo dos años con operaciones en la muñeca izquierda y además su rival es el claro dominador del circuito. De hecho, el europeo completó el Grand Slam de carrera al conquistar Roland Garros y buscará ser el primero en obtener el “Golden Masters”, para lo que deberá imponerse en la próxima cita, en el Masters 1000 de Cincinnati. ESPN digital y Télam.