Marcelo Tinelli quiso averiguar qué les pasa. La modelo y el periodista dejaron bien en claro su situación.

Aunque comparten todas las noches el estrado de ShowMatch, Pampita Ardohain y Ángel De Brito tienen cero onda. La modelo y el periodista atraviesan por estas horas una relación más que tensa, por lo que apenas se saludan cada vez que se cruzan en el certamen de Bailando por un sueño.  

“Ángel, ¿estás tan peleado con todos? ¿Tan peleado con Pampita? (José María) Listorti desparramó hoy un montón de cosas: que ustedes dos están súper peleados, que ni se dirigen la palabra. ¿Es así?”, preguntó directo Marcelo Tinelli, ni bien comenzó el programa del martes.

“Pero no es por pelea, siempre fue así. Hola y chau, y todo bien”, respondió el conductor de Los ángeles de la mañana, cortante.

“No es mala onda, es ser profesionales. Venimos, trabajamos en un clima cordial. No somos amigos, no hablamos por chat, ni por mail ni por teléfono”, redondeó la ex de Benjamín Vicuña. “Por chat alguna vez hablamos… No ahora”, corrigió Ángel.

El episodio que generó la discordia entre los jurados ocurrió la semana pasada, luego de que el periodista le echara la culpa a la modelo de contar la noticia del supuesto embarazo de Eugenia Suárez y Vicuña.

“Pampita estuvo en Miami y habría contado en una reunión: ‘La China está embaraza’. Eso lo escucharon algunos y en dos minutos se desparramó por todos lados. Cuando llegó esa persona varón (¿por Nacho Viale?) a Buenos Aires, se lo contó a su familia y amigos, y comenzó a dar vueltas la noticia, por eso el viernes lo contamos acá”, había relatado De Brito en su ciclo de las mañanas de El Trece.

“Yo tuve una vida con tantos altos y bajos, que el tiempo va a acomodar todo, se va a saber quién soy. El periodista que ‘diga que yo le dije’ es un mentiroso. No tengo nada que ver en esto, que venga y me lo diga en la cara ese periodista porque es un descarado y un mentiroso”, dijo Pampita consultada por el programa Este es el show, aunque sin nombrar a su ahora enemigo.

“Yo no me dirijo la palabra con Ángel; no hablamos, no le cuento de mis cosas, no tengo tiempo para dedicarle a los demás… Lo que hagan los demás a mí no me importa, no le dedico ni cinco minutos de mis días, es una infamia. Y Benjamín sabe perfecto quien soy”, cerró.