Nazarena contó por qué su hija aceptó la propuesta de ShowMatch. Y a pesar de oponerse a su regreso, ella se encargó de negociar la plata con Ideas del Sur.

“Barbie NO”. Con esas dos palabras, y en mayúscula la negativa, Nazarena Vélez descartaba que su hija, Barbie, vaya a incorporarse al Bailando por un Sueño. Pero cinco días después, la joven actriz fue confirmada por Marcelo Tinelli para sumarse al concurso de ShowMatch y, pese a su oposición, la madre se puso al hombro la negociación y fue la encargada de cerrarle el contrato. ¿Pero qué es lo que llevó a Bárbara a aceptar? Enterate los motivos.

Primero, hay que recordar que, al igual que en 2015, la hija de Alejandro Pucheta y Naza estaba en la línea de partida del Bailando de este año. Incluso, posó en la producción fotográfica de todos los participantes. Sin embargo, no llegó a salir de boxes.

Como estaba en pleno conflicto con su ex novio, Federico Bal, una separación que incluyó acusaciones de violencia de género, no soportó las presiones psicológicas de coincidir en el mismo espacio de trabajo -aunque todavía existe una restricción perimetral para que él se acerque a ella, podían llegar a cruzarse-. Y se bajó.

El reality empezó y a esta altura quedan 15 parejas en competencia, entre ellos, Bal, junto a Laura Fernández, los campeones 2015. Sin embargo, dada la renuncia de varias, la producción eligió tres nuevos concursantes. Los anunció MT el lunes por la noche: Nicole Neumann, Lizy Tagliani y… ¡Barbie Vélez!

¿Qué cambió para que en cinco meses esta mujer, de 22 años, aceptara participar del mismo programa que el hombre al que acusó de “golpeador”? ¿Acaso es masoquista?

La que salió a dar la cara por su hija, una vez más, es Nazarena. Invitada en Intrusos, la actriz contó: “No, Barbie no se lo quiere cruzar. Si la perimetral se puso porque él la fue a buscar a un boliche. No viene por ahí… Pasa porque ya se cansó, dijo ‘basta de perder laburos, de tener que esconderme'”.