Con la presencia de Natalia Oreiro y la directora Lorena Muñoz y la exhibición de “Gilda, no me arrepiento de este amor”,  se llevó a cabo en el Complejo Penitenciario Federal IV de Mujeres de Ezeiza (provincia de Buenos Aires) la primera acción del programa “Ciclo de cine en cárceles”.
 
La actividad se realizó a partir del convenio suscripto entre el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, la Procuración Penitenciaria de la Nación y la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina, para que las personas privadas de su libertad puedan acceder al derecho a la cultura.
 
En el acontecimiento estuvieron presentes el Procurador Penitenciario de la Nación, Dr. Francisco Mugnolo; el director general de Protección de Derechos Humanos de la Procuración Ariel Cejas Meliare; la jefa de equipo de Género de la Procuración, María Santos; la asesora de la Procuración, Mariana Volpi; la secretaria técnica de la Academia de Cine, Verónica Calvo y en representación del INCAA, Viviana Dirolli (Gerenta de Fomento) y Paula Zupnik (coordinadora de Espacios INCAA y Programas Especiales).
 
Tras exhibirse la película, la célebre actriz y cantante y la realizadora mantuvieron una charla con las internas. Allí, ambas describieron cómo llegaron a desarrollar la historia de la intérprete trágicamente fallecida. “Gilda fue una mujer muy valiente que tuvo que superar muchos prejuicios sociales y familiares para poder hacer lo que siempre quiso: cantar. Quienes atraviesan un momento difícil, como estar privadas de su libertad, también deben superar el prejuicio social al volver a insertarse a la sociedad”, expresó Oreiro.
 
El “Ciclo de Cine en Cárceles” realizará periódicamente proyecciones de películas nacionales en diversos complejos penitenciarios del país.