El Instituto que es querellante en una causa penal contra el músico, le recomendó disculparse y mostrarse arrepentido de sus dichos discriminatorios.
En esta Argentina del siglo XXI, en el que no pasa un día en que se descubra un nuevo femicidio, discriminar a una mujer no puede salirle gratis a nadie. Menos, si sos una celebridad. Y sino, que lo diga Gustavo Cordera.

“Es una aberración de la ley que si hay una pendeja de 16 años con la concha caliente quiere coger, vos no te las puedas coger. Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo porque son histéricas y sienten culpa por no poder tener sexo libremente. Si yo tengo algo bueno para darte puedo desvirgarte como nadie en el mundo. A mí háblame de cómo te sentís y te entiendo, pero si me hablás de los derechos no te escucho porque no creo en las leyes de los hombres, sí en las de la naturaleza”, fueron los dichos completos del ex líder de la Bersuit Vergarabat.

Las polémicas declaraciones se dieron en el marco de una charla con estudiantes de periodismo del terciario TEA Arte, orientado al espectáculo y la cultura. Tras escucharlo, un alumno publicó sus dichos en su cuenta de Facebook y el posteo se viralizó.

Y aunque el Pelado adujo que se trató de un juego donde intentó provocar a estudiantes y les pidió disculpas a todas las mujeres (“Me mandé una recontra cagada… Soy una persona enferma que necesita ser sanada”, reconoció), la sociedad le cayó encima con mucha indignación. Y el músico, de 54 años, ahora afronta una causa penal.

En ese marco, el Instituto Nacional contra la Discriminación, Xenofobia y Racismo (Inadi), , que es querellante contra él, emitió un comunicado en el que llama a Cordera a “ofrecer una postura pública de conciliación, reconocimiento del error y llamamiento a prácticas respetuosas de los derechos de las mujeres” ya que sus dichos fueron discriminatorios en el marco de la Ley 23.592.

El músico está imputado por “apología del delito” e “incitación a la violencia colectiva” en una causa que lleva adelante el juez Canicoba Corral. La denuncia fue radicada en agosto por el Gobierno Nacional en forma conjunta por el Consejo Nacional de las Mujeres de Presidencia de la Nación y el Inadi. Y se suma a las otras dos presentadas ante la Unidad Fiscal para la Investigación de Delitos contra la Integridad Sexual de Niñas y Niños (Ufisex) y el juzgado de Instrucción N°19, a cargo del juez Diego Slupski.

El Instituto se ofrece “para servir de nexo con la representación de la sociedad civil”, ante quienes debería manifestar su arrepentimiento. Sin embargo, a Cordera le ofrecieron previamente la posibilidad de un descargo, pero no acudió a los encuentros pautados con la sociedad civil y los representantes de los colectivos. Así lo aseguró el Dr. Javier Buján, interventor del Inadi, en diálogo con La Nación.

Y mientras el Pelado anuncia su vuelta a los escenarios para el 9 de diciembre, en Córdoba, Buján proyecta que si Cordera manifestara una postura de arrepentimiento y, sobre todo, colaborara en la difusión de prácticas respetuosas sobre los derechos de las mujeres, el juez podría tenerlo en cuenta.

Señaló el interventor: “El juez Canicoba Corral lleva adelante una causa penal en su contra por apología del delito de violación. Está en sus manos y nosotros vamos a estar aportando pruebas, para preservar los derechos colectivos de las mujeres. Que él hiciera pública una retractación sería una señal de ese arrepentimiento para mostrar una falta de intención de todo su accionar. Podría ser considerado como un atenuante”.

¿Será acaso posible?