El empresario se animó a un enorme diseño en la espalda que los representa a ellos como pareja. Ya prometió otro tattoo para Roque.

A pocas semanas de convertirse en padre de su primer hijo, el empresario Leo Squarzon se tatuó por amor. El novio de Amalia Granata se inmortalizó en la espalda un león y una leona, dibujo que los representa a ellos como pareja. Aunque dolió, ya prometió otro tattoo especial para Roque.

La cara del rey de la selva arriba, y su hembra abajo, están realizados en tinta negra con escalas de grises. Leo pasó el lunes por las manos de Ezequiel de INK Tattoo Studio, ubicado en Rosario, ciudad natal de Amalia.

El proceso fue registrado por la periodista con el celular de su pareja. “El león y la leona… Vamos por Roque ahora #Terrible #Único #NoDoyMas”, escribió el hombre en sus redes sociales, junto a la prueba de su piel enrojecida. Todo el diseño se realizó en un día.  

Amalia transita la semana 37 de su segundo embarazo (ya tiene a Uma, del Ogro Fabbiani), aunque ya debió ser atendida de urgencia por fuerte contracciones. “El bebé quiere salir y no puede. Me descompensé y terminé en la guardia del Otamendi”, había relatado ella, una vez pasado el susto. Su médico le dijo que todo se debía al estrés por lo que tenía que aflojar con el trabajo y las preocupaciones.

La pareja viene de un año complicado, ya que Leo fue escrachado públicamente por su amante, llamada Pau Linda, quien mostró fotos y chats calientes entre ellos. El empresario reconoció el affaire y le pidió perdón a Amalia.

La panelista lo perdonó y juntos decidieron seguir adelante con su familia para recibir a Roque en armonía. “Leo no es pirata, es un boludo y se equivocó. Yo también hice lo mismo en otras relaciones”, lo justificó Amalia.