Una creación periodística de Luis Pedro Toni

Susana Giménez se quiere sacar de encima otro Mercedes Benz

A 30 años del escándalo con el auto para discapacitados, la diva remata su auto. ¿Se lo comprará algún admirador? Enterate cuánto pide.

Susana Giménez no aprende más. Nadie duda de que es fanática de Mercedes Benz, la casa alemana de automóviles. De hecho, así se llama su única hija. Aunque también es cierto que ese nombre le trajo varios dolores de cabeza a Su. Y ella, parece, no escarmienta. Es que a casi 30 años del escándalo en el que quedó envuelta al importar un auto utilizando una licencia de discapacitados, la diva de los teléfonos puso en venta su Mercedes…

Instalada en su imponente chacra en Punta del Este, si algo no tiene Susana son problemas de movilidad. De hecho, como desde hace años, llegó a Uruguay en un vuelo privado. Y lista, claro, para pasar las Fiestas de Navidad y Año Nuevo con su familia. Pero antes de partir, esta vez tomó una decisión particular: poner en venta el impactante Mercedes Benz, negro, modelo 2008, con vidrios blindados y, cuentan, muy pocos kilómetros.

Cuidadosa y obsesiva por tenerlo siempre impecable, Susana sabe que su auto es una oportunidad única para los amantes de los fierros. Y, claro, también para sus seguidores, quienes podrían acceder a manejar el mismo coche que la rubia condujo. Y no es solamente una manera de decir, eh.

Si bien Susana tiene un chofer para esos días en los que no tiene ganas de ponerse al volante o cuando sale tarde del canal tras hacer su programa, ella también disfruta de la sensación de plantarse en el asiento del conductor y apretar los pedales a fondo.

De hecho, que haya decidido desprenderse de su auto no quiere decir que próximamente se la vaya a ver viajando en tren, subte o colectivo… La idea de Su es comprarse un cero kilómetro. ¿De qué marca? La misma, claro.

Lo curioso de toda esta historia es que Susana les encargó la venta de su auto a los hijos de José Cacho Steimberg,  quien fue el mismo que le vendió, en 1987, el Mercedes 550 SE que había ingresado al país a nombre del discapacitado Cayetano Ruggiero. Y que, octubre de 1991, fue encontrado escondido entre fardos de pasto en la estancia de Huberto Roviralta, quien por aquel momento era la pareja de Su.

En aquel entonces, la actriz fue procesada por encubrimiento de contrabando y dijo que había sido estafada en su buena fe por Steinberg. Claro que no le fue tan fácil demostrarlo. Recién en 1996, en un fallo discutido, fue sobreseída.

El tiempo pasó, claro. Y hoy Susana volvió a confiar en la familia Steinberg. Tanto que les habría dado el consentimiento para “rematar” el autito en unos 80.000 dólares. Un precio levemente inferior al del mercado. Pero se descuenta que no le va a impedir llegar a fin de mes. Es más, ese dinero será destinado a la compra del tutú nuevo.

Tiempo para escuchar ofertas tiene. Aunque todavía no lo confirmó, la idea inicial de Susana era permanecer en Uruguay hasta el 29 de enero, para pasar ahí su cumpleaños. Tal vez luego volar hacia Miami. Y recién ahí regresar a la Argentina y ponerse al volante de su nuevo chiche. Otro Mercedes, sí. No aprende más…