Las apuestas la daban como candidata y, finalmente, “Una mujer fantástica”, del cineasta  Sebastián Lelio, NACIDO EN ARGENTINA, pero técnica y cinematograficamente formado en el país trasandino, resultó la ganadora del Oscar a mejor película hablada en idioma extranjero entre las estrenadas en 2017 en Estados Unidos.

Histórico: “Una mujer fantástica” gana el Oscar como mejor película extranjera. Triunfa el cine chileno. El mismo Lelio definió a su película como una historia de amor y no como un filme abanderado por una causa. En este caso es la historia de una mujer transexual que debe enfrentar la hipocresía de los familiares de su pareja, un hombre recién separado, qué sorpresivamente fallece estando con ella festejando un inminente viaje que podría ser el comienzo de una nueva vida para ambos.

Lelio, que recibe este valioso premio para él mismo y la cinematografía chilena casi como un regalo por su 44 cumpleaños, el próximo jueves, vive en Alemania desde después del éxito obtenido por su anterior filme “Gloria”, cuando abrió un restaurante allí.

Pero, además, forma parte de una camada de cineastas que han puesto al cine chileno en las pantallas de los principales festivales del mundo y con “Una mujer fantástica” ratificó el talento ya mostrado en sus anteriores obras.

Lelio acaba de terminar otros dos filmes: “Disobedience”, versión de la novela de Naomi Alderman que aborda el lesbianismo en una comunidad judía ortodoxa de las afueras de Londres y la remake estadounidense de “Gloria”.

Con el premio Oscar a “Una mujer fantástica” y en relación a los premios de la Academia de Hollywood, Chile empata con la Argentina dos a dos, ya que en 2015 ya había obtenido uno con el excelente
cortometraje “Historia de un oso”, de Gabriel Osorio Vargas, frente a los dos argentinos para los largometrajes “La historia oficial” y “El secreto de sus ojos”.

La ceremonica comenzó recordando el papelón del año pasado

El humorista Jimmy Kimmel, inauguró instantes después de las 22 (hora argentina) la ceremonia de entrega de la 90ma. edición de los premios Oscar con un monólogo donde recordó el papelón del año pasado cuando se confundieron los sobres a la hora de anunciar al filme ganador de la ceremonia.

En el Dolby Theatre de Los Ángeles y con transmisión para la Argentina a través de la señal de cable TNT, el conductor de la gala hizo irónicas referencias a la lucha de las mujeres contra los abusos sexuales y por la igualdad de paga y oportunidades en la poderosa industria cinematográfica de Hollywood.

En ese plano y parándose junto a una enorme réplica de la estatuilla dorada ubicada a su derecha en el escenario, lo presentó como al “hombre más querido y respetado. Tiene las manos donde se debe, nunca dice una palabra y no tiene pene. Es el tipo de hombre que necesitamos aquí”.

#Metoo

Pese a la indiferencia en la previa al movimiento #Metoo, que denuncia los casos de abuso en la industria, el comienzo de la gala estuvo marcada por la reivindicación al trabajo de la mujer en el cine y a los años de acoso que sufrieron, en una noche que cuenta con “La forma del agua”, del mexicano Guillermo del Toro, como máxima favorita con 13 nominaciones y que tuvo a la chilena “Una mujer fantástica” como mejor película extranjera.

Fue Rita Morelo la estrella de 86 años de “Amor sin barreras”, de Jerome Robbins y Robert Wise, la encargada de entregar el premio a Sebastián Lelio por la cinta chilena interpretada por la actriz
transexual Daniela Vega.

“El Oscar no tiene pene y ese es el tipo de hombre que necesitamos aquí”, dijo entre risas el presentador de la gala Jimmy Kimmel, quien destacó la decisión de la Academia de expulsar al exitoso productor Harvey Weinstein, acusado por más de 500 mujeres de acoso y abuso sexual.

En ese sentido, Kimmel, que repite conducción respecto al año pasado, también comentó: “Este año será recordado como el que los hombres se portaron tan mal, que las mujeres comenzaron a enamorarse de pescados”, en referencia al filme “La forma del agua”, de Del Toro.

Kimmel, además, recordó que sólo el 11% de las películas de Hollywood son dirigidas por mujeres y recordó que en “Todo el dinero del mundo”, de Ridley Scott, Mark Wahlberg cobró un millón y medio de dólares por el mismo trabajo en el que Michel Willimas obtuvo 80 dólares por día.

En esta primera parte, fue Sam Rockwell el ganador como mejor actor de reparto por su interpretación de un violento y estúpido policía en “Tres anuncios por un crimen”, de Martin McDonagh, otra de las cintas favoritas.

En tanto, Allison Janney ganó como mejor actriz de reparto en la interpretación a una siniestra madre en “Yo soy Tonya”, del director Craig Gillespie.

En la segunda parte de la gala apareció al sección “México por Estados Unidos” con un despliegue a lo Hollywood de la canción de “Coco”, con Gael García Bernal en voz, y una reinvidación a los dreamers, los inmigrantes que arribaron a suelo estadounidense siendo menores de edad y que el presidente, Donald Trump, quiere echar.

“Estamos con ustedes”, dijo la actriz Lupita Nyong’o al presentar a los nominados por diseño de producción, categoría que ganó “La forma del agua”.

A su vez, también hubo un guiño para las películas de superhéroes para las próximas ediciones de los premios que entrega la Academia de la Ciencia y las Artes Cinematográficas de Hollywood, con menciones a “Pantera Negra” (Marvel) y “Mujer Maravilla” (DC).

“Dunkerque”, que compite como mejor película y director (Christopher Nolan), se fue imponiendo en las categorías técnicas como edición de sonido y mezcla de sonido.

Con un escenario que simula en un palacio moderno de estilo barroco, la 90 entrega de los Oscar no contó con número de música de apertura, algo atípico para estas galas, que cuenta, por primera vez, con un nominado, Jordan Plee, por dirección, guión y película.Jornada digital-santiago de chile.