El actor Fernando Heredia, de larga trayectoria en el teatro, la televisión y el cine, falleció hoy a los 94 años en la Casa del Teatro, institución en la que residía desde hace algún tiempo y que se encargó de dar a conocer la triste noticia.

“Con profundo dolor comunicamos que falleció el actor y director Fernando Heredia, alojado en la Casa del Teatro desde hacia muchos años. Cómo olvidar el famoso Teleteatro para la hora del té junto a Maria Aurelia Bisutti”, señala el escueto comunicado, dando cuenta del pasado de galán que había cultivado el actor cuando promediaba su carrera.

Nacido en Buenos Aires el 10 de octubre de 1923, Enrique Alonso -tal su nombre real- debutó en el cine en 1946 con Inspiración, de Jorge Jantus, donde también actuaban María Concepción César, Alberto de Mendoza, Francisco de Paula, Raúl del Valle y María Esther Gamas. Tiempo después participó de un puñado de películas más, como Los hijos del otro (1949), de Catrano Catrani, La sonrisa de mamá (1972), de Enrique Carreras, con Libertad Lamarque y Palito Ortega, y la española Después del sueño(1992), de Mario Camus.

En teatro su carrera fue mucho más extensa: tuvo su propia compañía hacia 1954 en sociedad con Nélida Bilbao, con la que presentó Variaciones sobre un mismo tema, de Eduardo Pappo, y compartió escenarios con María Concepción César en El ángel de barro, de Gerardo Ribas, en el Teatro Nacional Cervantes.

Además fue dirigido por Antonio Cunill Cabanellas en La dulce enemiga, de André Paul Antoine, en 1950, junto a Alberto Closas y Alberto Bello, secundó a Gloria Guzmán en la exitosa Los maridos de mamá, de Abel Santa Cruz, y en 1958 acompañó a Luis Sandrini y Malvina Pastorino en El baile, de Edgar Neville.

Su última incursión como actor fue, justamente, en teatro con El último encuentro, al lado de Hilda Bernard y Duilio Marzio. “Este es el personaje que siempre había estado esperando”,  contó en su momento a La Nación en 2009, al referirse a su trabajo en la obra de Sándor Márai que dirigió Gabriela Izcovich en el Teatro de la Comedia.

También obtuvo reconocimientos como director por las obras Descalzos en el parque (1967), de Aldo Nicolaj, con Nelly Beltrán, Beatriz Bonnet y Maurice Jouvet, y fue régisseur de las óperas Tosca, La traviata, La bohème, El barbero de Sevilla, Così fan tutte y Lucía de Lammermoor, señala Télam.

Pero fue la televisión la que lo hizo popular, al debutar en 1956 como galán de María Aurelia Bisutti en el Teleteatro para la hora del té, por el viejo Canal 7. Más allá del color: La vida de Gauguin y Degas (1958), en compañía de Bisutti, Narciso Ibáñez Menta, Silvia Legrand y Fernanda Mistral, Los Premios Nobel, con Amelia Bence, la tira La salvaje, con Gloria Ferrandiz, Nathán Pinzón y Rosa Rosen, y El amor tiene cara de mujer, de Nené Cascallar, fueron algunos de los ciclos que lo tuvieron como protagonista.

También fue parte de unitarios como Gran teatro universal (1970), y de telenovelas como Frente a la facultad (1971), con Pablo Alarcón, Arnaldo André y Leonor Benedetto, y La historia de Celia Pirán (1972), con Marta González, Raúl Aubel y Jorge Barreiro.