Una creación periodística de Luis Pedro Toni

“The Expanse”, OJO SERIE QUE ATRAPA…

Escuchaba no hace mucho a alguien quejarse porque ‘Doctor Who’ se había vuelto política en esta nueva temporada. En ese momento tuve dos pensamientos: el primero fue que la serie lo ha sido toda la vida; el segundo, que la ciencia ficción no se entiende como género sin reflejar el momento sociopolítico en el que se concibe una historia.

Hoy vamos a hablar de un magnífico thriller político que retrata, con a veces dolorosa similitud, una grave crisis universal cuyas ramificaciones van desde la ONU hasta más allá del cinturón de
asteroides. Y no, no es que a los de ‘House of Cards’ les hayan entrado delirios de grandeza en su nueva temporada, es que estoy hablando de ‘The Expanse’, una de las series de ciencia ficción más
interesantes que se pueden ver.

Con tres temporadas (emitidas en SyFy) y una cuarta en camino (en Amazon), podemos considerar ‘The Expanse’ como una de las series más ambiciosas que hay en emisión. Ambiciosa tanto por la propuesta argumental como porque supone la adaptación (más o menos fidedigna) de una saga literaria que cuenta, hasta el momento, con siete novelas (la octava sale en 2019), la mayoría inéditas en España. James S.A. Corey (pseudónimo de Daniel Abraham y Ty Franck) diseñan, a partir de ‘El despertar del Leviatán’, un universo en el que la humanidad ha logrado colonizar un Sistema Solar dominado por dos megapotencias: Tierra, devastada ecológica y económicamente que sobrevive a merded de sus acuerdos con corporaciones; ý Marte, una república militar que gasta todo su esfuerzo en intentar terraformar el planeta.

Ambas potencias mantienen una relación que podemos calificar perfectamente de guerra fría. De hecho, al comienzo de la serie están en el punto de destrucción mutua asegurada en caso de estallar. Tanto la Tierra como Marte (y sus corporaciones), dependen de los recursos del Cinturón (el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter) para prosperar.

Mientras, los cinturianos viven bajo gran presión y expectativas de vida nada halagüeñas, intentando sobrevivir en un entorno que depende de la importación de recursos externos tan básicos como el agua o el aire. Al ser gobernados por corporaciones, sus derechos civiles son prácticamente inexistentes: son trabajadores cuyo sustento más básico no está del todo garantizado. Al igual que en los libros, ‘The Expanse’ comienza con la destrucción del Canterbury, un carguero que transporta hielo dirección Ceres, uno de los más importantes asentamientos del Cinturón. Esta destrucción provoca grandes altercados entre los cinturianos, que ven sus raciones de agua recortadas al extremo.@Albertini—xataka digital