Tras el escándalo policial, la pareja fue a sacar la partida de nacimiento de su hijo Salvador Uriel al Registro civil y hubo un pase de facturas de la rubia a su esposo.

A pocos días del nacimiento de Salvador Uriel, Vicky Xipolitakis protagonizó un confuso episodio con su marido Javier Naselli. La rubia llamó a la Policía y pidió que intervinieran, ya que estaba junto a su hijo recién nacido. “Estoy con un bebé y tengo un demente”, expresó la “griega” en la comunicación telefónica.

Luego de dos semanas, ambos se mostraron juntos para inscribir a Salvador Uriel en el registro civil. Después de hacerlo, el cronista de “Los ángeles de la mañana” los abordó y le preguntó a Naselli cómo estaba la relación con Xipolitakis: “Estoy muy bien, muy contento. Sacamos la partida de nacimiento. Por supuesto que estoy enamorado de Vicky”.

Pero la rubia le paró el carro: “El amor se demuestra con actitudes, no con palabras”. El periodista, en chiste, le dijo: “Télefono, Javier”. La flamante mamá le siguió el juego: “Teléfono, Javier. Que los tiene apagados los teléfonos, Javier”.

Ante la consulta del cronista acerca de si la relación estaba bien entre ambos, Xipolitakis expresó: “Por ahora. Veremos con el tiempo”.