Una creación periodística de Luis Pedro Toni

Los Vengadores al rescate de los Oscar

Ante la falta de un conductor, los organizadores de la ceremonia tienen planeado recurrir a “los héroes más poderosos de la Tierra”

Corren los días y la entrega de los premios Oscar 2019 está ya a sólo un mes y medio sin que ninguna de las personas convocadas haya aceptado todavía el rol de conductor de la misma. La Academia de Hollywood ve como se agota el tiempo y por eso ya busca alternativas de emergencia a esta situación, que no es inédita pero sí poco frecuente, como la presencia de los actores de las películas de los Avengers (Los Vengadores) de Marvel Studios.

En los últimos años, la ceremonia ha encendido polémicas como la ausencia de actores negros nominados o de reivindicaciones como las que impusieron las integrantes del movimiento feminista “Time’s Up” en 2018, pero en esta ocasión la controversia corre por el lado de la ausencia de candidatos a ser el anfitrión de la velada.

El comediante negro Kevin Hart, uno de los humoristas más populares de los Estados Unidos, fue el convocado inicialmente. Pero, tras el anuncio del cómico, algunos usuarios de redes sociales recordaron antiguos mensajes con contenido homófobo de Hart que fueron publicados en Twitter entre 2009 y 2011.

Ante las críticas, Hart optó primero por enfrentar a los trolls, y finalmente acabó pidiendo perdón y renunciando a conducir la gala. “He tomado la decisión de renunciar a presentar los Óscar de este año porque no quiero ser una distracción en una noche que debería ser celebrada por tantos artistas talentosos e increíbles”, escribió.

Ante este anuncio, la Academia salió a buscar un reemplazante “de urgencia” para la ocasión, y por eso comenzaron a sonar nombres conocidos como los de Hugh Jackman, Tina Fey, Amy Poehler y Justin Timberlake, pero ninguno de ellos aceptó.

Los Óscar, una gala más seria y encorsetada que otras ceremonias y con una audiencia televisiva en descenso en los últimos tiempos, parecen haber dejado de ser una oportunidad de lucirse para convertirse en un posible dolor de cabeza con el que sus presentadores tendrían mucho que perder y poco que ganar.

De esta manera, la Academia, que ya tropezó en 2018 con el anuncio y retirada del Óscar a la mejor película popular, podría optar por una gala sin presentador ni monólogo inicial y con múltiples estrellas de Hollywood presentando las categorías, según desveló la revista Variety la pasada semana.

Aunque sería una situación inusual, no sería la primera vez que los Óscar no tienen anfitrión ya que, por ejemplo, las veladas de 1969, 1970, 1971 y 1989 no tuvieron maestro de ceremonias.

The Hollywood Reporter, por su parte, indicó recientemente que los Oscar intentarían reunir sobre el escenario a varios de los actores de Avengers: Endgame.

La jugada, que involucraría a una de las películas más esperadas del año, más que superhéroes tendría una aplastante lógica empresarial: Disney, que posee los derechos sobre las películas de Marvel, es también la dueña de ABC, la cadena que emite los Óscar.

Entre tanto interrogante sobre la gala y con demasiadas incógnitas sobre quién dirá sobre el escenario “Bienvenidos a los Óscar”, en la Academia se pueden agarrar, al menos por ahora, a una reconfortante certeza: que los nominados a sus estatuillas se darán a conocer el próximo 22 de enero.