Una creación periodística de Luis Pedro Toni

Madera pura de espectáculo: ya descansa en PAZ

Los restos de Santiago Bal fueron llevados, este martes por la mañana, al panteón de actores del cementerio de Chacarita. Carmen Barbieri y los hijos del director teatral, acompañaron a su padre a su descanso final.

El féretro fue cargado por sus dos hijos varones, Federico y Mariano, y su hermano Coco.

Carmen, exesposa del artista, se mostró muy angustiada, abrazando a Julieta, la hija que Santiago tuvo con Silvia Pérez.

Además, asistieron al último adiós a Santiago sus seres queridos, famosos y allegados. La reunión fue íntima y se llevó a cabo a puertas cerradas.

Personajes del espectáculo, como Matías Alé, Marina Calabró y Jorge Rial, hablaron ante las cámaras para expresar sus condolencias. Fede Bal también se tomó un momento para hablar con los medios. Sobre cómo se siente después de la pérdida, expresó: “Tengo un montón de sensaciones. Hay algo de mucha tristeza y angustia como cuando uno pierde un papá y piensa que no lo va a ver más, que no lo va a tocar más, que no le va a sentir el olor, o que no le va a preguntar las cosas que uno necesita como hijo”.

“Pero hay una suerte de alivio muy grande y esto solo lo sabe la gente que tiene papás que están enfermos y que tienen vidas difíciles de salud. Le prometimos que vamos a cuidar a mamá, que es el amor de su vida. Yo le prometí particularmente que la voy a cuidar toda la vida y que voy a estar más cerca de mis hermanos. Le prometí que al apellido lo voy a cuidar como lo más grande que me dieron”, agregó.

Así mismo, reveló que antes de entrar en coma, su padre le dijo una frase que solía decirle cuando era pequeño: “Me dijo que no tengo que olvidarme nunca de ser feliz”, contó Federico. 

Finalmente pidió que su padre sea recordado con una sonrisa. “No es momento de estar tristes, es momento de estar en paz. Él se merecía un descanso”.

Por su parte, las palabras de Carmen, cargadas de dolor, fueron: “Yo nunca estoy lista para que alguien se vaya, menos gente que quiero. No estoy lista para no verlo nunca más. Me queda todo lo que me enamoró de él, su inteligencia, lo tan caballero que era, me queda lo mejor. Y lo peor, que fue el final de nuestra relación, casi no me acuerdo ya”.