Una creación periodística de Luis Pedro Toni

Rottemberg levanta el telón de sus teatros entre agosto y septiembre

El productor indicó que si la pandemia lo permitiese podrían volver a funcionar paulatinamente a partir de un informe que presentó a las autoridades de Buenos Aires y Mar del Plata, las dos ciudades donde tiene salas.

Carlos Rottemberg aspira, si el cuadro sanitario de la pandemia lo permitiera, a reabrir paulatinamente salas entre agosto y septiembre en un gesto que, arriesga, podría llamarse “ensayos generales de la temporada 2021”.

Durante una charla con Télam, Rottemberg ratificó que el 2020 teatral “está perdido aunque se hagan funciones a partir de agosto-septiembre”, pero defendió la idea de poder abrir en ese momento como ensayo de lo que será la temporada del año próximo.

El empresario apoyó sus dichos en un informe que este lunes cursó a las autoridades de Buenos Aires y Mar del Plata, las ciudades donde tiene sus salas, en el que sostuvo que “la apertura en la última parte del año serviría a los efectos de ‘adelantar el miedo’ en el público, además de retomar los contratos de trabajo hoy inexistentes”.

En otro punto de su fundamentación, Rottemberg precisó que “en caso de trasladar la apertura de los espectáculos recién al verano se llevaría puesta gran parte de la temporada 2021, anulando además el movimiento del espectáculo fuerte en los centros veraniegos, especialmente de Mar del Plata y Carlos Paz”.

El escrito de Rottemberg, al que accedió esta agencia, fue cursado al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y al ministro de Cultura de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta y Enrique Avogadro; y también al intendente de Mar del Plata y su secretario de Cultura, Guillermo Montenegro y Carlos Balmaceda.

En esta ciudad posee las salas Multiteatro, Multitabaris, Metropolitan y Liceo, mientras que en la principal localidad de la costa atlántica es propietario del Mar del Plata, Complejo Bristol-Lido-Neptuno y Complejo América-Atlas.

“Ya tuve algunas respuestas de algunos de ellos, bien predispuestos a este planteo”, deslizó el teatrista, quien dijo que en materia de espectáculos está comunicado “con todo el mundo, porque es prueba y error”.

“Los teatros de Nueva York y Londres siguen cerrados y en España –reveló sobre el panorama global- hay una discusión por la capacidad de aforo”.

Consultado acerca de la modalidad del streaming como opción para ampliar la capacidad de espectadores por espectáculo, afirmó categórico que su posición “es defender el teatro único, irrepetible,
artesanal y con la presencia de público”.

“Cuando tenés el edificio teatral no podés distraerte demasiado y hay que laburar para cumplir con el objetivo que la actividad teatral impone, que es el espectáculo en vivo, una vez que las autoridades sanitarias consideren que se puede”, resaltó Rottemberg.

Las que siguen son las demás propuestas e ideas de Rottemberg “para una hoja de ruta que busca brindar alguna certidumbre a los trabajadores y empresas de la actividad teatral y musical en vivo”,
que el productor afirma plantear “a mano alzada, siempre sujeta al resultado sanitario que se experimente durante el mes de mayo” y que por supuesto debe anteponerse “a cualquier otra prioridad o interés”:

•Abrir espacios “de abajo hacia arriba” en cantidad de personas y/o capacidad nominal, creciendo por períodos quincenales a partir de agosto/septiembre, siempre bajo protocolo sanitario.

•Reconocer, al margen de la autorización para retomar la actividad, que el mismo público tomará su propia dinámica en retornar paulatinamente a las salas. Eso será producto de una lógica primera
inercia post cuarentena, más una economía hogareña más dañada que antes del inicio de la pandemia.

•Los espectáculos necesitan, a diferencia de un local comercial que puede abrir sus puertas de un día para otro, unos dos meses de preparación previa para ensayos y lanzamiento.

•La actividad se asemeja a lo ya definido para los vuelos de cabotaje, a los cuales se autorizó desde ahora la venta de pasajes para el 1 de septiembre.

•Siempre bajo un protocolo específico para espectáculos públicos acorde a la concurrencia, tener certezas durante el mes de junio también empezaría a tranquilizar a la comunidad artística, hoy sin
perspectivas y mayoritariamente angustiada.

“Si logramos mancomunar esfuerzos entre artistas y trabajadores del medio, más empresas y autoridades, podríamos soñar en terminar el año mejor que como lo comenzamos. ¡Y bien sabemos que también de soñar se trata el espectáculo!”, concluyó el teatrista en su informe, a modo de aliento a los actores del sector.