Una creación periodística de Luis Pedro Toni

El negrito Manuel en la casa Rosada

En una emotiva misa en la capilla de la Casa de Gobierno colocaron la
estatuilla del esclavo africano que se convirtió en cuidador de la
Virgen de Luján. Los detalles de una historia por muchos desconocida.
El lunes 8 de noviembre, justamente en el Día de los Afroargentinos,
se realizó una misa para recibir la estatuilla de quien fuera el fiel
cuidador de la imagen de la Virgen de Luján.
Casi 400 años pasaron para que el Negro Manuel llegue a la capilla de
la Casa de Gobierno Nacional para ponerse a los pies de la Virgen de
Luján, patrona de la Argentina. Este lunes 8 de noviembre, justamente
en el Día de los Afroargentinos, en recuerdo de la capitana negra
María Remedios del Valle (conocida como la Madre de la Patria), se
realizó una misa para recibir la estatuilla de quien fuera el fiel
cuidador de la imagen de la Virgen de Luján.

Este africano traficado y esclavizado cuidó de la imagen de la Virgen
gaucha desde 1630, cuando se produce el primer milagro que la imagen
de la Virgen, decide no moverse e impide que avance la carreta que la
trasladaba a Santiago del Estero.

En la Estancia Rosendo, a orillas del río Luján, queda al resguardo de
la Virgen morocha como testigo del primer milagro, que es quedarse en
esas inhóspitas tierras a 200 años de iniciarse la creación del Estado
argentino. Luego vendrían los milagros. Su primer registro fue Pedro
Montalbo, el sacerdote enfermo que salva su vida por las curaciones
practicadas por el Negro Manuel. “La Virgen lo quiere para que sea su
capellán”, fue la frase que le dijo Manuel mientras lo ungía en el
pecho con el aceite de una lámpara.

Duna peregrinó junto a sus compañeros de Misioneros de Francisco,
desde la sede de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular hasta
la Casa Rosada.
“Antes que me enviaran a misionar a la Argentina, mi mamá me dijo que
me quedara tranquilo porque acá me iba a cuidar la Virgen como lo hizo
con el Negro Manuel”, afirmó a Télam el sacerdote de Ruanda, Jean
Bosco Nsengimana Mittigo, quien concelebró la misa con el capellán de
la Casa de Gobierno, Francisco Roverano, en la que se colocó la imagen
creada por las monjas Carmelitas Descalzas de Luján.

El cura ruandés es el párroco de una capillita del barrio 17 de
noviembre, de Villa Celina. Todos lo conocen como Juan. “La historia
del Negro Manuel no es un mito, es una realidad. Existe un acta de
venta que lo confirma. Entonces le podemos pedir hoy a Dios
reconciliarnos con nuestra historia y poder perdonarnos. Así nos
podremos sentir hermanos y hermanas. Porque al olvidarse la hermandad
es que viene la esclavitud”, señaló durante la celebración religiosa
En la misa había dos imágenes del Negro Manuel . Ocurrió que hace dos
semanas Gabriel “Pato” Duna, de los Misioneros de Francisco de Luján,
junto a Tamara Barbará, coordinadora de la Comisión de
Afrodescendientes de la Asociación del Personal Legislativo (APL),
habían acercado la primera imagen del africano a los pies de la
Virgen.

La historia se remonta al 25 de octubre pasado, a una misa celebrada
por el capellán Roverano en la que participó el subsecretario del
programa “El Estado en tu barrio”, Juan Manuel Vila, y el teniente
coronel Guillermo Gomar, tercero al mando de la seguridad en la Casa
de Gobierno, quienes desde aquel día, empezaron a coordinar los
preparativos para las misas y la llegada de las estatuillas del Negro
Manuel.

La misa en la capilla no pudo contar con la participación de todos los
referentes de la comunidad afro en Argentina.
Gomar quedó conmovido cuando acompañó al presidente de la Nación
Alberto Fernández en su sorpresiva visita en la Casita de la Virgen en
Luján. De allí nació la idea de entronizar al “siervo de Dios”, como
llamó el Papa Francisco,al protector africano de la Virgen.

“El Negro que vino atado en el fondo del barco, sin comer ni beber,
fue reivindicado cuando viajó en primera y con un presidente”, recordó
“Pato” Duna, el peregrino y referente de los Misioneros de Francisco
en Luján, sobre la primera visita del presidente Alberto Fernández al
Papa, en la que llevó de regalo una imagen del Negro Manuel, creada
por las monjas Carmelitas Descalzas.

“Cuando en las peregrinaciones cargamos en nuestros hombros la imagen
del Negro Manuel, estamos alzando al humilde y él es el último de los
últimos por su condición de negro y esclavo. Ese es el significado. De
ahí el amor que nos llevó llevó, hace cinco años, a colocar su imagen
y toda su historia en la Basílica de Luján. Y el año pasado, una
ermita en la ruta del peregrino”, explicó Duna, quien este lunes
peregrinó junto a sus compañeros de Misioneros de Francisco, desde la
sede de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular hasta la Casa
Rosada. Lo acompañó Esteban “Gringo” Castro, secretario general de la
UTEP.

Antes que sonaran los tambores y cantos de los afro-bolivianos se
acercó el Fernando “Chino” Navarro, el Secretario de Relaciones
Parlamentarias, Institucionales y con la Sociedad Civil.
La imagen del Negro Manuel había sido vandalizada el 30 de julio
pasado, en una ermita de la Ruta Provincial 7. Fue por este
incalificable ataque que Duna conoció a Tamara Barbará,
afrodescendiente y trabajadora de la Biblioteca del Congreso de la
Nación, quien considera que existe una conexión entre Manuel y María
Remedios del Valle, por quien este lunes se celebró el Día de los
Afrodescendientes. “Ella era capitana del Ejército del Norte y era la
única mujer a la que Belgrano permitía combatir a su lado. Justamente
Belgrano era muy devoto de la Virgen de Luján y seguro que Remedios
conocía la vida de Manuel. La historia demuestra que los afro que
vinieron esclavizados pelearon por la libertad de nuestro país y otros
países de la región”, afirmó Barbará.

La misa en la capilla no pudo contar con la participación de todos los
referentes de la comunidad afro en Argentina. En virtud de ello, por
primera vez se realizó una ronda de exposiciones libres en el Salón de
los Pueblos Originarios, donde hubo bailes, música y reflexiones de la
historia de los africanos en Argentina y su relación con la fe
católica. Estuvieron presentes, entre otros, Carlos Álvarez, de la
secretaria de Derechos Humanos de Nación; Elena Ferreyra, secretaria
de Derechos Humanos de la Asociación de Personal Legislativo (APL);
José Antonio Mas Morales, referente cubano de la Agrupación 8 de
Noviembre; la cantante Dulce Mota; Emanuel Ntaka, el ex Mambrú;
Miriam Gómez, de la Asociación Caboverdiana; Flexa Correa Lopes,
representante de la comunidad de afrodescendiente; y  la histórica
activista Elida Obelia Murature.
Antes que sonaran los tambores y cantos de los afro-bolivianos se
acercó el Fernando “Chino” Navarro, el Secretario de Relaciones
Parlamentarias, Institucionales y con la Sociedad Civil, quien recibió
una imagen de María Remedios del Valle con el pedido que sea colocada
en el salón de las Mujeres de la Casa de Gobierno.telam