Una creación periodística de Luis Pedro Toni

La dosis de refuerzo busca frenar la nueva ola de contagios

El Gobierno anunció que el personal de salud y las personas mayores de
70 años recibirán una de refuerzo, en consonancia con los métodos que
utilizan diferentes países por la evidencia de que la respuesta inmune
empieza a declinar después de los seis meses.

Por Natalia Concina—Las dosis de refuerzo que son aquellas que se
dan más allá del esquema inicial de vacunación y que comenzaron a
aplicarse en la Argentina. Foto: Daniel Davobe
Las dosis de refuerzo que son aquellas que se dan más allá del esquema
inicial de vacunación y que comienzan a aplicarse en la Argentina -en
principio a personal de salud y mayores de 70 años-, son una de las
estrategias que utilizan diferentes países que atraviesan una nueva
ola de coronavirus para mitigar su impacto por la evidencia de que la
respuesta inmune empieza a declinar después de los seis meses.

“Es importante distinguir la tercera dosis de la dosis de refuerzo;la
tercera dosis es un adicional al esquema primario que está indicada
para determinadas poblaciones que tienen menor capacidad de respuesta
inmune (de cualquier edad y con cualquier vacuna) y en el caso de la
Argentina se indicó a los mayores de 50 años que hubieran recibido
Sinopharm”, explicó a Télam la médica infectóloga Florencia Cahn.

“Cuando hablamos de tercera dosis significa que para considerar que
una persona tiene el esquema completo debe tener las tres dosis,
mientras que la dosis de refuerzo se da al menos seis meses después de
completar los esquemas”Florencia Cahn

“Cuando hablamos de tercera dosis significa que para considerar que
una persona tiene el esquema completo debe tener las tres dosis,
mientras que la dosis de refuerzo se da al menos seis meses después de
completar los esquemas primarios y tiene que ver con que en todas las
vacunas con el paso del tiempo la respuesta inmune va disminuyendo”,
añadió.

El 10 de noviembre el Gobierno nacional anunció que el personal de
salud y las personas mayores de 70 años que recibieron la segunda
dosis hace más de seis meses recibirán una dosis de refuerzo.

“El objetivo es proteger lo antes posible al personal de salud y a los
adultos mayores que hayan completado su esquema hace más de seis
meses, para luego avanzar con el resto de la población en forma
escalonada y simultánea en función de cada plan provincial”, indicó el
subsecretario de Estrategias Sanitarias, Juan Manuel Castelli, durante
el anuncio.

La administración de una dosis de vacuna, en estos casos, se debe a
que es probable que la respuesta inmunológica disminuya con el tiempo,
sostuvo el texto oficial.

La inmunización, la clave ante un posible repunte de casos

Consultado sobre si el momento de aplicar esta dosis es oportuno, el
médico infectólogo Lautario De Vedia afirmó que “ante un escenario de
posible repunte de casos es mejor que nos encuentre con la mayor
cantidad de gente bien inmunizada”.

“Esto es porque, como decimos siempre, la importancia de la
inmunización no es sólo la protección individual sino reducir la
circulación del virus; entonces, cuanto mayor protegidas están las
personas menos posibilidad de que el virus circule”.

Ambos especialistas señalaron que todavía no está claro con qué
periodicidad habrá que aplicar los refuerzos a futuro.

“Varios estudios demostraron que la inmunidad cae a partir de los seis
meses. Esto no necesariamente implica que de aquí en más tendremos que
vacunarnos cada seis meses contra el coronavirus”, indicó Cahn.

“Cada estímulo antigénico aumenta la capacidad no sólo de anticuerpos
sino también de la memoria inmunológica, entonces hay que ver cómo se
comporta el organismo con el paso del tiempo”Lautaro De Vedia

En ese sentido, explicó que “hay vacunas con un esquema primario de
tres dosis como la quíntuple o la de la polio y después hay un
refuerzo que no hay que dar necesariamente cada equis cantidad de
tiempo; o la doble adultos (que cubre contra difteria y tétano), por
ejemplo, hay que darla cada diez años”.

En el mismo sentido De Vedia señaló que “no se sabe aún si habrá que
vacunarse cada seis meses, hay que seguir reuniendo evidencia
científica, porque no es una conclusión lineal la que se puede sacar”.

“Cada estímulo antigénico aumenta la capacidad no sólo de anticuerpos
sino también de la memoria inmunológica, entonces hay que ver cómo se
comporta el organismo con el paso del tiempo”, añadió el infectólogo.

La dosis de refuerzo anunciada esta semana se suma a la tercera dosis
que el Ministerio de Salud ya había indicado en octubre para personas
inmunocomprometidas (sin importar el esquema primario recibido) y
mayores 50 años que hubieran recibido las dos dosis de Sinopharm.

Además, en el último lineamiento de recomendaciones para tercera dosis
se incluyeron también a las personas con enfermedades autoinmunes y
con insuficiencia renal crónica que estén en diálisis.

Las situación en Europa

Más allá de las tercera dosis a poblaciones inmunocomprometidas, las
dosis de refuerzo (o booster) también se está dando en todo el
mundo,donde algunos países -sobre todo en Europa- se encuentran
atravesando desde hace semanas un nuevo incremento sostenido de casos.

En este contexto, el 11 de noviembre Pfizer y BioNTech anunciaron que
presentaron una solicitud para enmendar la Autorización de uso de
emergencia de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los
Estados Unidos (FDA) para una dosis de refuerzo de su vacuna que
incluya a todas las personas de 18 años o más.

“La mejor solución parece pasar por la combinación de sostener
cuidados y tener la mayor cantidad posible de la población
vacunada”Rodrigo Quiroga

Por su parte, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) aprobó el 4 de
octubre la dosis de refuerzo a quienes recibieron la vacuna de Pfizer
para “todas las personas mayores de 18 años, al menos seis meses
después de la segunda dosis”.

“Es interesante evaluar el comportamiento de la curva de casos en
otros países. Hay dos cosas que quedan claras cuando uno mira Europa y
es que en España y Portugal, si bien están aumentando los casos, el
crecimiento es menor al resto, probablemente porque tienen un
porcentaje mucho más alto de vacunados y sostienen uso de barbijos y
otros cuidados”, dijo a Télam el bioinformático de la Universidad
Nacional de Córdoba (UNC) e investigador del Conicet, Rodrigo Quiroga.

Y continuó: “El otro tema que queda muy claro es la relación entre
cantidad de personas no vacunadas y muertes; a menor porcentaje de
inmunización mayor cantidad de fallecidos. Esto se ve con claridad en
Bulgaria, Croacia y Hungría”.

Las dosis de refuerzo (o booster) también se está dando en todo el
mundo. Foto: AFP
Quiroga señaló que “otra cosa que estamos observando es que superando
el 85% de la población vacunada las hospitalizaciones y muertes son
muy bajas y también son menores los casos, como pasa en España y
Portugal; en cambio con el 70% o 75% pueden seguir habiendo muchos
contagios si se relajan los cuidados, como ocurre en Reino Unido”.

“Es decir que la mejor solución parece pasar por la combinación de
sostener cuidados y tener la mayor cantidad posible de la población
vacunada”, concluyó Quiroga.-telam