Nazarena Vélez contó detalles de su romance con Huberto Roviralta, el ex de Susana Giménez
Nazarena Vélez ntró a LAM para aportar su larga experiencia en el círculo mediático argentino, pero de vez en cuando se anima a hablar sobre sus experiencias de vida, fiel a su estilo, no teme al qué dirán y lo cuenta de la manera más honesta posible.
Claros ejemplos de su devoción por la verdad y lo que esto genera, son cuando opinó sobre la pelea entre Romina Gaetani y Facundo Arana, como también lo hizo cuando reveló sus razones por las que no volvería a trabajar con Georgina Barbarossa. Por si fuera poco, el último programa detalló sobre uno de sus romances más polémicos, el de Huberto Roviralta, el ex de Susana Giménez.
“Nunca salimos. Sí estuvimos como un mes viéndonos, pero no me dio ni un beso… Me divertía mucho del para fuera, lo que se generaba y yo me aproveché de eso. Él me contó que siempre estuvo muy enamorado de ella”, mencionó Nazarena Vélez sobre su romance con el ex de Susana Giménez.
Como dato de color, esta no es la primera vez que habló sobre este tema, ya que en el año 2012 tuvo una entrevista en donde contó todo a corazón abierto y desmintió los rumores existentes de la época sobre el mal comportamiento del empresario con ella.
“Roviralta nunca me tocó una teta, era re caballero, yo me estaba separando y me divirtió todo lo que se creó después. Me regaló un anillo importantísimo y lo llevé al living de Susana. Él no está orgulloso de su divorcio, él lo hizo porque él estaba muy enamorado de Susana y estaban como en una crisis. Susana lo manda a pasear a Miami, ella se va a Francia y aparece la foto con el Corcho (Rodríguez)”, detalló.
Y agregó: “Él creía que nos íbamos a casar. Salimos un montón de veces. Él dejó a su mamá para pasar la Navidad conmigo y me quería justificar que no era el ‘rata’ que todo el mundo decía. Me quería mostrar que venía de una muy buena familia. Me habló del video, no fue armado por él, sino por ella. Él sospecha de Susana, de que estuvo atrás. Nunca lo pudo comprobar”.
“Fue un caballero, pero nunca me dio ni siquiera un beso y no pudimos concretar. No me gustaba físicamente. Él quería comprarme una casa. Se me arrodilló delante de mucha gente. Se me arrodilla y me dice ‘me quiero casar con vos’ sin haberme dado un beso. Me dio mucha vergüenza, me dio como ternura y lástima”, cerró la actriz.