Roberto Gerbasi, activo periodista de radio 10, y amplio conocedor del
futbol nos aportó su opinión sobre lo que reporter.com.ar viene
consultando sobre la expectatativa de la albiceleste en Qatar y de los
DT argentinos que manejan otras selecciones.+ç
ESTA PARA FINALES…
Las expectativas acerca del desempeño del equipo argentino crecieron
sensiblemente tras la obtención de la Copa América del año pasado. Por
primera vez en mucho tiempo el seleccionado encontró un funcionamiento
compacto, tuvo a Lionel Messi en buen nivel futbolístico y cumpliendo
el rol de líder que siempre se le había reclamado, y además logró
quebrar el estigma de no poder ganar finales, que se había generado
tras las caídas en Brasil 2014 y en las dos Copas América ante Chile.
Desde ese momento cambió la actitud de la gente hacia el equipo, y ese
respaldo potenció aún más el rendimiento del conjunto, que no volvió a
perder ni a mostrar la irregularidad de ciclos anteriores.
De todos modos, el Mundial es una historia aparte. Un equipo puede
llegar a la Copa de la peor manera y terminarla brillantemente, como
el de 1986, o llegar como gran candidato y volverse en primera ronda,
como el de 2002. Los campeones se van “construyendo” durante el
torneo. Argentina tiene una zona accesible que no debería generarle
mayores inconvenientes para pasar a la segunda fase y, de allí en
adelante, dependerá de los cruces que le toquen, aunque, si el
rendimiento del equipo de Scaloni se mantiene en el nivel del último
año y puede aprovechar la fase inicial para colocar los cimientos de
un conjunto que resulte sólido de octavos en adelante, ni Brasil ni
ningún europeo aparece como claro favorito ante un eventual choque
mano a mano con nuestro seleccionado.

SCALONI, ALFARO, MARTINO

De los tres argentinos que dirigirán en Qatar, Lionel Scaloni es el
que dispone de mejor “materia prima” para llegar lejos en la Copa.
Argentina es, para la mayoría del ambiente futbolístico mundial, uno
de los grandes candidatos a quedarse con el torneo. Gustavo Alfaro
está en el otro extremo: Le cabe el gran mérito de haber llevado a
Ecuador a un Mundial por cuarta vez en toda su historia, pero
precisamente esa falta de tradición mundialista puede jugarle en
contra en una zona donde enfrentará a uno de los candidatos a llegar a
las instancias decisivas (Paises Bajos), al campeón de la Copa
Africana (Senegal) y al local, un equipo sin pergaminos pero cuya
condición de anfitrión (basta recordar la actuación de Corea del Sur
en 2002) puede fortalecerlo. Por último, la situación de Gerardo
Martino es ambivalente: Tiene equipo para aspirar a clasificar, pero
las constantes criticas del publico hacia el equipo a lo largo de todo
el ciclo ha desgastado al plantel y al cuerpo técnico, en una época en
que la actitud mental es tan importante como el talento, la táctica y
la preparación física.Roberto Gerbasi.